La investigación contra el supervisor de Flagrancia, Mario Parisí, quien fue denunciado por darle una paliza a su expareja, condujo hacia una nueva presunta maniobra delictiva de otro funcionario judicial, cercano al sospechoso, lo que agiganta el escándalo. Según la denuncia, Juan Pablo Ortega, secretario Relator de la Corte, se contactó con la víctima para tratar de convencerla y de que cambie su declaración, en dirección a que asuma que fue la que inició la pelea con Parisí con el fin de tratar de favorecerlo, dijeron fuentes judiciales. Por eso, desde Fiscalía le imputarán hoy a Ortega el delito de encubrimiento, mientras que, a Parisí, lesiones agravadas por el vínculo en contexto de violencia de género, amenaza agravada por uso de arma y desobediencia a una orden judicial.
Ortega es otro funcionario de peso en el Poder Judicial y es coequiper de Parisí en la Coordinación de la Asistencia Jurídica al Colegio de Jueces del sistema acusatorio. Además, es el coordinador de la Escuela de Capacitación Judicial de la Corte. Su conducta quedó bajo la lupa ocho días después de la denuncia contra Parisí. De acuerdo a las fuentes, el 25 de este mes, un médico amigo de ambos funcionarios judiciales se acercó hasta la casa de la mujer y le entregó 4.660 dólares y pasajes a Colombia y México. Tras insistir en que recibiera el mandado, le dijo que alguien quería hablar con ella y puso su celular en altavoz. Así, la víctima identificó la voz de Ortega, dado que explicó en la Justicia que sabe quién es y que trabaja en Tribunales. Además, expuso que le pidió que cambiara su declaración, que dijera que ella empezó la agresión y que reflexionara en cómo le iba a afectar la carrera a Parisí, indicaron las fuentes.
La denunciante no sólo plasmó esa situación, sino que también entregó los dólares y los pasajes en la Unidad Fiscal de Investigación (UFI) Cavig, cuyo personal entrevistó a la víctima dos veces en su hogar y dispuso custodia policial para su protección.
Según trascendió, hoy a las 14 se llevaría adelante la audiencia de formalización de la investigación penal preparatoria contra Ortega, a quien le imputarán el delito de encubrimiento, el cual tiene penas que van de seis meses a tres años de prisión.
A la misma hora se hará la audiencia de control de detención y de formalización de la acusación contra Parisí, en la que, por el lado de Fiscalía, estará Roberto Ginsberg. Por un lado, se le endilgará lesiones leves agravadas por el vínculo. Si bien había trascendido que la víctima había sufrido fractura de coxis tras la agresión, lo que llevaba las lesiones a graves, las fuentes destacaron que las pericias médicas comprobaron que no hay tal fractura. El agravante del vínculo se da por el hecho de haber mantenido una relación de pareja. Desde el entorno de la mujer habían resaltado que convivían hace un año y dos meses. También se le achacarán amenazas agravadas por el uso de arma, ya que habría utilizado una katana para amedrentarla. Un dato no menor: Parisí es experto en karate. Y también lo acusarán de desobediencia a una orden judicial. Sucede que el juez de Garantías Matías Parrón dispuso el 24 de este mes que ni el supervisor de Flagrancia ni sus allegados tuvieran contacto con la denunciante, lo que se denomina prohibición de acercamiento. No obstante, fue el médico amigo del funcionario judicial el que se acercó a la mujer al día siguiente para entregarle el dinero y los pasajes, el mismo día en el que Ortega se comunicó con la víctima, según la denuncia.
Detenido
Fiscalía había pedido la detención de Mario Parisí, lo que dispuso el juez Matías Parrón. El funcionario judicial se entregó el domingo. Su abogado Nasser Uzair había señalado que Parisí había sufrido heridas, las que fueron corroboradas por el médico legista. Así, deslizó que hubo una agresión mutua con la mujer.