Los dirigentes gremiales sanjuaninos nucleados en la Confederación General del Trabajo (CGT) decidieron ayer dejar en libertad de acción a sus afiliados ante el paro convocado para el 20 de noviembre por el líder de los Camioneros, Hugo Moyano, y el titular de la CTA, Pablo Micheli.

La medida de fuerza, que incluirá una movilización a Plaza de Mayo, en Capital Federal, se concretará para pedirle al Gobierno nacional el aumento del mínimo no imponible del impuesto a las ganancias, la universalización del salario familiar y un aumento de emergencia para jubilados y pensionados.

“Cada sindicato tomará su postura. Algunos adhieren al paro, otros no, pero ninguno movilizará gente a Capital Federal”, dijo Alejandro Kokot, titular del sindicato de Aguas y Gaseosas, en diálogo con DIARIO DE CUYO On Line.

Sindicatos como el de Panaderos, Casinos, UATRE, Plásticos, UTEDyC, Agua y Gaseosas, AFIP y Foecyt apoyan la medida nacional. Mientras que UPCN, Telefónicos, SOEME y FOEVA Rawson no acompañarán el paro. Los grandes ausentes fueron la UOCRA y la UOM. Precisamente el titular del gremio de la Construcción en San Juan, Eduardo Cabello, es el delegado regional de la central obrera.

Además de la CGT a nivel nacional y de la CTA, el que confirmó su apoyo a las medidas de fuerza fue el titular de la Federación Agraria, Eduardo Buzzi, quien dio a conocer que los productores rurales de su sector, junto a los enrolados en la UATRE, realizarán ‘piquetes en las rutas y en las rotondas‘ del interior del país el próximo 20 de noviembre, en adhesión al paro nacional convocado por la CTA de Micheli y que contará también con la adhesión de la CGT de Moyano.

Los gremios en San Juan están en una relación complicada porque la CGT tiene muy buena relación con el gobierno de José Luis Gioja, pero el sector que le responde a Moyano, en cambio, está enfrentado con la administración de Cristina Fernández. Por eso, hacer un paro en la provincia es ir contra las políticas del Ejecutivo local y nadie quiere ese panorama.

Por eso, una salida para quedar bien tanto con Moyano como con el gobernador Gioja es dejar en libertad de acción para que cada gremio decida.

En la práctica, a excepción de los Camioneros, conducidos por Enrique Castro, serán muy pocos los que van a adherir a la convocatoria, más allá de que puedan compartir los motivos de los reclamos, como son el impuesto a las ganancias que pesa sobre el salario de los trabajadores.