Buenos Aires, 14 de abril.- Militares y transportistas, los
primeros testigos que declararon en el juicio por el tráfico de
armas a Croacia y Ecuador, aseguraron hoy que en 1993 llevaron hasta el puerto de Buenos Aires "material bélico secreto".
Así se refirieron los testigos que iniciaron la etapa de
declaraciones testimoniales en el juicio en el que están siendo
juzgados por contrabando agravado el ex presidente Carlos Menem y otras 17 personas, entre ex funcionarios y militares, informaron fuentes judiciales.
Los militares Néstor Caballaro, en actividad y jefe de
seguridad de la fábrica de pólvora y explosivos de la ciudad de Villa María en 1993, y José María Insúa, retirado, declararon hoy que ni ellos sabían qué transportaban los camiones hasta el puerto de Buenos Aires, pero sí estaban en conocimiento de que era "material bélico secreto", se indicó.
Más de 70 camiones partieron desde distintas guarniciones
militares del país, como Villa María y Río Tercero, hasta el puerto de Buenos Aires, en un operativo de transporte a cargo de
Fabricaciones Militares, declararon los testigos.
El material fue subido a los camiones en contenedores
precintados y cerrados con candados, dijo por su parte Enrique Padilla, dueño de una empresa de transporte contratada por Fabricaciones Militares para hacer los traslados al puerto de Buenos Aires, agregaron las fuentes.
Los testigos refirieron que una vez en el puerto los
contenedores fueron descargados cerca de un buque con la inscripción "Croatialine".
El juicio ingresó en la etapa de declaración de testigos,
luego que finalizaron las indagatorias de los imputados que aceptaron hablar y la lectura de las declaraciones de primera instancia de quienes se negaron a exponer ante el Tribunal Oral en lo Penal Económico 3 de esta capital, que sustancia el juicio.
Junto a Menem también están siendo juzgados su cuñado y ex
asesor Emir Yoma, el ex jefe de la Fuerza Aérea Juan Paulik, el ex
titular de Fabricaciones Militares Luis Sarlenga y el supuesto
traficante de armas Diego Palleros, entre otros.
Los imputados están acusados de contrabando agravado de armas
realizado a través de dos decretos presidenciales de 1991 y 1995,
que dispusieron la venta de material bélico a Venezuela, Panamá y
Bolivia pero que tuvieron como destino final Croacia y Ecuador.
Sobre esos países había prohibición para comercializar armas, ya que con Ecuador la Argentina era garante de paz en su conflicto con Perú y Croacia tenía un embargo dispuesto por las Naciones Unidas.
El juicio continuará el próximo viernes a las 10.30 con la
declaración de nuevos testigos.