En un nuevo operativo, el primero de este año, ayer fueron detenidos 5 expolicías acusados de haber cometido delitos de lesa humanidad tales como arrestos ilegales con el uso de violencia y tormentos. La medida es la continuidad de una amplia investigación que lleva adelante el juez Leopoldo Rago Gallo por presuntas faltas cometidas por exmiembros de la Policía de San Juan en la época previa y con posterioridad al golpe militar del 24 de marzo de 1976.
Se trata de Felipe Pedro Molina, Andrés Walter Alderete, Armando Roque Carrizo, Onésimo Molina y Sixto Alberto Carbajal, quienes fueron capturados en distintos operativos que tuvieron lugar en los departamento de Rivadavia y Albardón por integrantes de la Policía Federal Argentina. Anoche permanecían alojados en esa dependencia policial, a disposición de la Justicia, según revelaron fuentes judiciales.
La causa se disparó en agosto de 2014 por un requerimiento de los fiscales Francisco Maldonado y Katia Troncoso (esta última ya dejó el cargo en la provincia) y fue inédita por la cantidad de involucrados. El proceso comenzó con 86 ex uniformados en la mira, pero el número bajó a unos 45 cuando se depuró el listado y se comprobó que muchos habían fallecido. Los primeros sospechosos cayeron el 14 de agosto y después vinieron nuevas detenciones.
A fines del año pasado, el juez Rago Gallo procesó a 13 expolicías por asociación ilícita, tormentos y privación abusiva de la libertad, además de imputarles homicidio a algunos de ellos. A este lote, el magistrado le impuso embargos de 5 a 30 millones de pesos y dispuso que continuaran detenidos, por lo que con los 5 apresados ayer son 18 los que están actualmente tras las rejas. La contracara fueron 7 exmiembros de la fuerza que quedaron en libertad por falta de mérito.
La sospecha es que los ex uniformados colaboraban con los grupos de tarea, integrados por miembros del Ejército, y participaron en operativos de detención e interrogatorios de dirigentes políticos, estudiantiles y sindicales de la provincia.
Para la época de los hechos investigados, Felipe Molina prestaba servicios en el Departamento de Asuntos Judiciales de la Policía (D-5), Onésimo Molina era miembro de la fuerza, Alderete formaba parte de la Unidad Regional Nro. 1 como oficial inspector, Carrizo integraba la Brigada de Investigaciones y Carbajal era comisario principal en la Seccional 21º de Jáchal.
Las nuevas detenciones tuvieron lugar justo el día después de que el represor Eduardo Daniel Vic fuera apresado en Córdoba (ver aparte).

