A través de su abogado, el diputado nacional del PRO, Eduardo Cáceres, busca sacar al fiscal Correccional Juan Manuel Gálvez de la causa en su contra por violencia de género. Según fuentes calificadas, el legislador esgrimió ayer que el representante del Ministerio Público podría perjudicarlo porque, en primer lugar, tendría una ideología política distinta a la de él, debido a que hace 10 años publicó en una red social un saludo de despedida por el fallecimiento del expresidente Néstor Kirchner. Y, en segundo término, planteó que tiene una enemistad manifiesta con su padre, el juez federal Miguel Gálvez, a raíz de cruces de opiniones que reflejó este medio. El fiscal rechazó tal recusación, por lo que hoy definirá el tema el titular del Cuarto Juzgado Correccional, Federico Rodríguez. ¿Una maniobra para dilatar el proceso? Si lo fuese, no tendría efectos prácticos debido a que, de acuerdo a las fuentes, si el magistrado tampoco le hace lugar al pedido y Cáceres llegase a apelar, tal medida no frenaría la indagatoria. Además, el fiscal puede no estar presente en dicha declaración y seguir participando del proceso.
La audiencia fue fijada a las 9, en la que el diputado nacional tendrá la posibilidad de hacer su descargo tras la denuncia de Gimena Martinazzo, quien ratificó en sede judicial las lesiones que le ocasionó tras una discusión que mantuvieron, además de las amenazas que habría sufrido. Cáceres puede abstenerse de declarar, lo que no implica un punto en su contra.
Pero, antes de la indagatoria, el legislador hizo una jugada, ya que pidió que el fiscal Gálvez sea apartado. Entre los argumentos se encuentra la supuesta enemistad con su padre, con quien mantuvo un intercambio de opiniones cruzadas, en este medio, sobre el rol de la Justicia Federal y el de Cáceres como político. El otro punto para solicitar la recusación fue que el representante del Ministerio Público posee una ideología política distinta al macrismo, dado que, en 2010, Gálvez había publicado en Facebook una sentida despedida del expresidente Kirchner.
Según las fuentes, el fiscal contestó que no está afiliado a ningún partido político, que hace 10 años no era funcionario público y que las diferencias que pudo haber tenido el diputado con su padre no influyen en su ánimo.