“Chile va a tener que contar con recursos, de lo contrario va a ser una sangría importante”, aseguró el alcalde de La Serena, Raúl Saldívar Auger, cuando se le consultó sobre el aporte que debe realizar el país trasandino para la construcción del túnel de Agua Negra. Por eso, consideró que ceder el cobro del peaje es la mejor opción para solucionar el financiamiento, el cual representa el 28 por ciento del costo la obra que debe absorber el Estado chileno, mientras que el resto está en manos de Argentina. Precisamente, en marzo pasado las autoridades de ambos países elaboraron un documento en el que Chile se comprometió a realizar el aporte económico a través del peaje.
De visita en la provincia, el alcalde participó del acto por los festejos del día de la independencia, en Rawson, y ayer brindó una charla sobre una mirada estratégica con respecto a Agua Negra. Previo a su exposición, Saldívar Auger dialogó con DIARIO DE CUYO sobre las alternativas desde el lado chileno para materializar el túnel. Si bien el alcalde aclaró que no tiene voto sobre ese punto, ya que es una decisión del Gobierno central trasandino, opinó que otras posibilidades como la vía crediticia o recurrir al sistema nacional de inversiones es un proceso más lento que requiere de acuerdos políticos.
Con el traje de promotor del túnel, el alcalde destacó que una vez que esté consolidado, “va a ser extraordinario y útil para ambos países”. Manifestó que La Serena es un destino turístico por excelencia y que la conexión con Argentina servirá para aumentar esa actividad, sobre todo en épocas de menor afluencia, como en invierno. “El objetivo es ser un destino que nos permita traer a sanjuaninos, mendocinos y demás turistas”.
Con el horizonte puesto en la actividad comercial, Saldívar Auger resaltó que la idea es ser “plataforma de los productos que Argentina enviará a terceros países”. En ese aspecto, la ventaja radica en que no sólo San Juan, sino también provincias como Córdoba y Santa Fe, e inclusive países como Brasil, podrán transportar sus mercaderías por el corredor bioceánico, pasar por Agua Negra y desembocar en el puerto de Coquimbo, en Chile, para viajar hacia mercados asiáticos, en un ruta marítima mucho más corta que por el Atlántico. El alcalde reconoció que el puerto chileno “necesita mejorar su infraestructura en cuanto a capacidades de carga”, pero que tiene potencialidades a desarrollar. Y como señal de esperanza, comentó que en la Cuarta Región circula la opinión (no el dato oficial) que se instalaría otro puerto en el Norte de La Serena.

