A los 100 máximos deudores que registra OSSE les pusieron plazo para regularizar su situación: arreglan en 15 días -hábiles-, o se viene el cobro de la deuda con un embargo, subasta de bienes o inmuebles y además los mandan al Veraz. Desde anteayer en la página web de la repartición están publicados los nombres de los ‘incobrables’’, donde entre ellos se cuentan 28 empresas, y por ejemplo el que más debe es una entidad que nuclea a productores con 272.734 pesos y el que ‘menos’’ adeuda es un usuario particular domiciliado en Capital, que registra un saldo de 18.528 pesos. Entre los cien acumulan un rojo que alcanza los 3.900.989 pesos.

Como adelantó a inicios de este mes DIARIO DE CUYO, en la repartición que maneja el agua para consumo humano en la provincia estaban decididos a cobrar una deuda que a esta altura es millonaria, pero que por las vías normales no han podido lograr hacer comparecer a los titulares de las cuentas con más mora por las oficinas de avenida Ig. de la Roza. Es por eso que tomaron el toro por las astas y apelaron a un recurso que ya dio buenos dividendos en otras reparticiones del Estado: el escrache. La Dirección General de Rentas de la provincia había dado el puntapié en San Juan en junio pasado cuando ‘colgó‘ por primera vez en su web el nombre de los 16 grandes morosos, y que hoy por hoy amplió esa lista a 100. La metodología permitió que algunos se acerquen a la DGR a saldar o proponer una salida a deudas que en un puñado de casos -7 en total- supera ampliamente el millón de pesos.

En tanto que para OSSE resulta inédita ya que el único antecedente que se asemeja es un listado con cientos de deudores que publicó en los diarios locales en septiembre del 2008, pero en esa oportunidad sólo emplazaba a aquellos usuarios que se habían acercado para hacer un plan de pago y que acumulaban hasta dos meses de mora. En esa oportunidad no figuraban los nombres de los emplazados, sólo la dirección y el número de cuenta. Esta vez sale todo: nombre o razón social, cuenta, dirección y, principalmente, el monto adeudado. En este sentido, el abanico de empresas y usuarios que figuran es bastante variado: hay bodegas, aceiteras, una reconocida concesionaria, una clínica, una fábrica de jugos, una clínica, un tradicional frigorífico, entre otras firmas.

El argumento que decantó en esta medida y que apunta el presidente de la repartición, Cristina Andino, es que a la obligación que tiene todo ciudadano de pagar sus servicios, en este caso está el ‘agravante’’ que se trata de un servicio que es esencial para la vida, más aún para una provincia enclavada en medio de un desierto como es San Juan. ‘Nos parece que es vergonzoso que algunos usuarios deban lo que deben, más aún por tratarse del agua que es un elemento vital’’, explicó en su oportunidad Andino.