Tal como estaba previsto, los presos dejarán de circular por los pasillos de Tribunales a fin de mes, señaló el cortista Guillermo De Sanctis, quien dijo que, de máxima, será en los primeros días de agosto. La movida se debe a la nueva alcaidía, obra que se inició en el subsuelo del edificio 25 de Mayo y que ya están casi finalizadas. En una recorrida se constató que ya están listos los cuatro nuevos calabozos y sólo falta acondicionar las salas de audiencias, en las que los detenidos serán derivados para atender el llamado de los jueces.
Además de los calabozos y las salas de audiencia, el área contará con cámaras de seguridad y hasta con una sala de reconocimiento de detenidos. En el único momento que los presos saldrán del subsuelo será cuando deban enfrentar un juicio, "ya que no tenemos capacidad física para hacer un camino directo entre las celdas y las salas", destacó De Sanctis.
Cada una de las celdas tiene una capacidad de diez personas como máximo y el nuevo sector cuenta con un área para la policía, diez salas de indagatorias, una sala de reconocimiento, una oficina administrativa y dos baños. Todas las zonas contarán con un sistema de aire acondicionado central. El presupuesto de la obra es de 2,4 millones de pesos.