En un juicio abreviado, un hombre aceptó 8 años de cárcel tras admitir que cometió aberrantes delitos sexuales contra dos hijas.

La denuncia contra M.A.P. fue radicada el pasado 26 de febrero en la UFI Anivi por la madre de las víctimas, quien manifestó que su hija mayor le había contado que la violaron, sin dar mayores precisiones al respecto, pero luego llorando le había dicho que se trataba de su padre, manifestando que el hombre la tocaba desde que era muy pequeña y que le tomaba fotos y videos.

Iniciada la investigación, el Ministerio Público Fiscal pudo acreditar que el acusado cometió delitos en perjuicio de la integridad sexual de sus hijas de 14 y 11 años. La primera de ellas sufrió ataques reiterados, durante su infancia, cuando tenía entre 6 y 7 hasta sus 13 años. Según los voceros, dichos ultrajes consistieron en tocamientos en las partes íntimas de la niña, los que fueron repetidos en el tiempo y tuvieron lugar en el domicilio donde convivían como así también en los lugares de trabajo del imputado. Para cometer estos ilícitos, el padre se valía de violencia y amenazas hacia la niña. Asimismo, quedó acreditado que el sujeto violó a la menor en reiteradas ocasiones. La primera vez que la penetró ella tenía entre 6 y 7 años de edad y ocurrió en la radio donde trabajaba en ese entonces. La última vez que la accedió fue a fines de 2023.

Por otro lado, en relación a la otra menor, el acusado utilizaba su celular para sacar fotos y filmar el cuerpo de la niña. Además, abusó de ella cuando la niña tenía entre 4 y 6 años y se extendieron hasta sus 9. El hombre la obligaba a que le tocara el miembro bajo la excusa de que se trataba de un juego. También la manoseaba por debajo de la ropa, mientras ella dormía. Estos hechos ocurrieron en la habitación matrimonial ubicada el interior la vivienda donde convivía el acusado junto a su grupo familiar.

La fiscal del caso fue Valentina Bucciarelli (UFI Anivi), quien llegó a un acuerdo con la defensa para imponer la pena en un juicio abreviado.