Un sujeto que se separó de la madre de su hija y cuando visitaba a la nena la manoseaba, fue condenado este lunes por la Justicia de San Juan. Al imputado le impusieron un castigo de 3 años, pero como tenía una condena anterior, le aplicaron una pena única de 3 años y 8 meses de prisión efectiva, dijeron fuentes judiciales.

El fiscal del caso fue Roberto Mallea (UFI Anivi). En un juicio abreviado, R.R.J. aceptó la pena por el delito de abuso sexual simple agravado por el vínculo y la guarda.

Según la investigación, se logró acreditar que de la unión de la denunciante con el imputado, de quien se encontraba separado, nacieron tres hijos, entre ellos la niña víctima, de 6 años. En razón del régimen de visitas acordado entre ellos, el imputado veía a su hija en la puerta de la vivienda o en su camioneta. Se estableció que, aprovechando las visitas al domicilio materno, y cuando la niña tenía entre 5 y 6 años, sin poderse determinar con exactitud las fechas, el sujeto efectuó tocamientos con sus manos en las partes íntimas de la víctima por debajo de la ropa, lo cual sucedió en varias oportunidades.