El brutal ataque que tuvo lugar el lunes por la madrugada en un conventillo de Barracas cobró este domingo la tercera víctima mortal, confirmaron fuentes a TN. Se trata de Andrea Amarante, de 43 años.
La mujer tenía el 75% del cuerpo quemado y permanecía internada desde la agresión en grave estado en el Hospital del Quemado. Amarante, que era la más joven de las cuatro, era sobreviviente de la tragedia de Cromañón.
La noticia también fue difundida por el Ministerio de Mujeres y Diversidad de la Provincia de Buenos Aires: “Lamentamos el fallecimiento de Andrea, la tercera víctima fatal del crimen de lesboodio en Barracas. Exigimos justicia y el inmediato esclarecimiento de los hechos. Los discursos de odio matan”.
La primera mujer que murió fue Pamela Cobbas, de 52 años, horas después del salvaje ataque. El miércoles pasado falleció la segunda víctima, identificada como Mercedes Roxana Figueroa, que tenía el 90% del cuerpo quemado y permanecía internada desde la agresión en grave estado en el Hospital del Quemado.
En tanto, Sofía Castro Riglos es la única sobreviviente a la aberrante agresión y es la que menos lesiones sufrió, aunque permanece en el Hospital del Quemado para su recuperación.
La investigación recayó en el Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional N°14, a cargo del fiscal Edmundo Rabbione, Secretaría 143 del Dr. Alberto Gegunded. Investigan si se trató de un ataque de odio, vinculado a la orientación sexual de las víctimas, ya que no se trató de la primera vez que las agrede.
Cómo fue el brutal ataque en Barracas
El trágico episodio ocurrió durante la madrugada del lunes en el segundo piso de un edificio ubicado en la calle Olavarría al 1600, en el barrio porteño de Barracas. Mientras se controlaba el fuego, 30 personas debieron ser evacuadas.
Según informaron fuentes policiales, un hombre de 62 años -identificado como Justo Fernando Barrientos- agredió a las dos parejas de lesbianas y tras ello prendió fuego la habitación en la que estaban.
Si bien trascendió que el acusado habría manipulado una garrafa para provocar el estallido, se conoció luego que había lanzado una bomba casera contra el cuarto en donde dormían las mujeres, lo que provocó las llamas mortales.
Tras la agresión, Barrientos se autolesionó con una sierra afilada y tuvo que ser atendido en un centro de salud con custodia policial. El hombre ya fue dado de alta y quedó detenido, acusado de homicidio.