En el inicio del juicio contra Mario Parisí, el alto funcionario judicial acusado por violencia de género, declaró su expareja, la denunciante, quien brindó un duro relato que complica al imputado.
La mujer, de apellido Sánchez, contó el episodio que la llevó a realizar la denuncia. “Me golpeaba, me daba patadas, me tiraba el pelo, me zamarreaba, me empujaba contra la pared y yo quería escaparme. En un momento me dí cuenta de que me habían quedado las marcas de la pared. Cuando me suelta, empiezo a correr por el departamento hacia el comedor”, relató. Y siguió: “Me quería alcanzar y en eso me paro al lado del sillón y él enfrente mío me seguía insultando. Yo le decía que me quería ir y él agarró un cuchillo que había en la mesa y lo desenfundó. Lo levantó y me dijo ‘te voy a matar’. Yo me agaché sobre el sillón porque él se me venía y sentí como la punta del cuchillo me entraba en la piel, en la carne. Yo creí que me mataba, que ese era mi fin”.
En otro tramo de su declaración, la denunciante expresó que era constantemente humillada y denigrada. Dijo que en medio de discusiones fue escupida por Parisí y que le decía que era una “p…” y una “sucia”.
Parisí fue trasladado a una sala contigua donde pudo observar y escuchar a su expareja a través de un monitor.
EL JUICIO
El debate es presidido por la jueza Ana Carolina Parra. La defensora del imputado es Ivana Salas, mientras que Reinaldo Bedini se presentó como abogado querellante. Los representantes del Ministerio Público Fiscal, a cargo de la acusación, son Roberto Ginsberg y Claudia Ruiz.
Parisí fue denunciado en noviembre de 2021. Su entonces pareja denunció ante la UFI Cavig que -entre otros tipo de violencia- había sido golpeada y lesionada por el hombre.
La causa contra Parisí es un verdadero escándalo, ya que se trata de un funcionario de peso dentro de Tribunales que fue supervisor del sistema de Flagrancia, cumplió roles como coordinador de la asistencia jurídica al Colegio de Jueces del sistema acusatorio y fue el responsable de la Unidad Conclusiva de Causas.
Durante el debate, además de la palabra de la víctima, declararán alrededor de 30 testigos. Entre ellos figuran el exfuncionario judicial Juan Pablo Ortega y el médico Jorge Gil, quienes estuvieron involucrados en la causa. Sin embargo, ambos fueron apartados por un beneficio que establece el Código Penal, que desliga de responsabilidades a amigos íntimos de un imputado. Los dos habrían intentado persuadir a Sánchez para que desistiera de la denuncia.