El fiscal de violencia familiar, Pablo Cuenca Tagle, ha imputado a los padres del niño de nueve años que se intoxicó por consumir cocaína en Córdoba. Los acusa de cometer una “negligencia grave”.

Según la prueba recabada hasta el momento, se sospecha de un obrar negligente, aunque no se descartan otras hipótesis. El menor permanece internado y se espera su testimonio para esclarecer los hechos.

El lunes, el niño ingresó al Hospital Eva Perón de la ciudad de Córdoba con un cuadro febril y en buen estado de salud. La investigación se centra en determinar si tenía cocaína en sangre. El caso sigue bajo observación médica.

El padre del pequeño lo llevó al centro médico pensando que tenía fiebre, pero los análisis revelaron la presencia de drogas en su cuerpo.

El ministro de Salud de la provincia, Ricardo Pieckenstainer, lamentó el incidente y dijo que “el niño ingresó con un cuadro respiratorio, que el equipo médico consideró que puede tener consumo de alguna droga”.

El ministro también explicó que se está abordando el caso multidisciplinariamente e involucrando a la Secretaría Nacional de Niñez, Adolescencia y Familia (SENAF) para ayudar tanto al niño como a su familia.

Previamente, el director del hospital, Guillermo Checchi, había dicho a Cadena 3 que el niño ingresó por un diagnóstico de una convulsión atípica.

El padre del niño negó en su momento que su hijo haya consumido drogas. “El papá ha negado que el niño consume, nosotros estamos investigando la situación”, declaró Checchi.

No se descartan otras medidas judiciales que podría tomar el fiscal.