Una relación tóxica durante casi 20 años casi terminó de la peor manera. Una mujer identificada como Cintia Pamela Páez fue condenada este viernes a 3 años y 6 meses de prisión efectiva después de haber sido declarada culpable del delito lesiones graves agravadas tras haber apuñalado al padre de su hijo.

La víctima mantuvo una relación de pareja con Páez durante 19 años y tienen un hijo en común de 16 años. Según los investigadores, desde sus comienzos la relación estuvo marcada por la violencia, era una relación disfuncional de varios años, donde el maltrato y abuso de poder estuvieron presentes. Las peleas y reconciliaciones marcaron un patrón que naturalizó la violencia, adaptándose y acomodándose a ese funcionamiento, dándose así el círculo de la violencia. En ese contexto y el momento de los hechos, la víctima y Páez se encontraban separados.

La gota que rebasó el vaso se dio el pasado 21 de abril de este año cuando el hombre estaba en la casa de su padre, acompañado de una nueva pareja, cuando cerca de las 20.30 arribó Páez quien al verlos juntos comenzó a insultarlos. La víctima le pidió que se retirara y comenzaron a forcejear, y fue en ese momento que la mujer tomó un cuchillo tipo tramontina que se encontraba arriba de la  mesa y se lo clavó en el costado izquierdo del pecho, a la altura del corazón, produciéndole una herida punzo cortante en región de pectoral costado izquierdo.

La pareja actual del damnificado salió corriendo a pedir auxilio a los vecinos quienes llamaron al 911 e inmediatamente se hicieron presentes en el domicilio personal policial y una ambulancia. La victima fue trasladada rápidamente al Hospital Rawson, con diagnostico de trauma penetrante de tórax; derrame pericárdico severo y derrame pleural la presunta victima que evolucionó con shock por presunto taponamiento cardíaco, motivo por el cual fue intervenido quirúrgicamente de urgencia.

Con todos esos argumentos, el juez de Garantías, Guillermo Adarvez declaró culpable a Pamela Cintia Páez quien deberá cumplir 3 años y 6 meses de prisión en el Servicio Penitenciario Provincial.