Un sujeto que fue cómplice de un ladrón que vestido de policía y empuñando un arma de fuego asaltó una casa de La Bebida, Rivadavia, fue condenado a 2 años de prisión condicional, es decir, sin encierro, dijeron fuentes judiciales.
En un juicio abreviado en Flagrancia, Juan Pablo Damián Román (35 años) admitió su culpabilidad y aceptó la pena por el delito de robo agravado por ser en poblado y en banda con arma de fuego en grado de tentativa
El fiscal del caso fue Carlos Rodríguez.
El hecho ocurrió el pasado martes, a eso de las 22.30. La acusación indica que a esa hora en esa vivienda de La Bebida se presenta un sujeto a golpear la puerta, con vestimenta de policía de la provincia y una cuellera que le tapaba la mitad del rostro. Al ser atendido, diciendo ser policía, pregunta con nombre y apellido por el jefe de familia, argumentando que necesitaba chequear el medidor de electricidad, ya que tenía información sobre que se encontraba conectado clandestinamente.
La casa posee una puerta reja, muy fuerte, que después da paso a una de madera para ingresar al interior de dicho domicilio, y al sujeto se lo atendió solamente abriendo la puerta de madera pero sin flanquear la reja.
En un momento dado, y atendido por el padre de familia, este abre la puerta reja para acceder al requerimiento de quien decía ser un efectivo policial, cuando en ese momento el desconocido extrae un arma de fuego, le apunta al dueño de casa y le dice “esto es un asalto, llamá a los que estén en la casa”. Ante ello se presenta el hijo del jefe de familia, a quien el delincuente le indica que le haga entrega de su celular y que vacíe sus bolsillos, todo esto encontrándose todavía en el umbral de la puerta.
Luego comienza a llamar y a hacer señas a dos sujetos que se encontraban a unos metros del lugar, al grito de “vengan, vengan”, lo cual alertó a los vecinos quienes comenzaron a lanzarle piedras a los intrusos, y es cuando los moradores aprovechan para cerrar la puerta de acceso.
Con los vecinos en alerta, los ladrones decidieron darse a la fuga, subiéndose a una camioneta Ford Eco Sport blanca.
El hijo del dueño de casa aprovechó para detener un auto que pasaba y pedirle que lo auxiliara, ayudándole a perseguirlos. Al poco andar se topan con un móvil policial y comienzan a rastrear para dar con la Eco Sport con el asaltante vestido de policía y sus dos cómplices.
Alertadas todas las unidades sobre el hecho, logran divisar dicha camioneta con un sujeto en su interior, quien resultó ser el ahora condenado Juan Pablo Damián Román.
Sobre el asiento trasero estaba la cuellera del “policía”, quien en un barrio vecino pudo bajarse y escapar, al igual que el otro cómplice.
Juan Pablo Damián Román manejaba la Eco Sport y no pudo huir.