La Justicia de San Juan condenó a un hombre que identificó como Juan Domingo Álvarez a tres años de prisión de cumplimiento condicional tras admitir su culpabilidad en un caso de abuso sexual simple. El hecho ocurrió el 21 de junio de 2024, en un contexto intrafamiliar, y fue denunciado por la víctima casi dos meses después.

Según consta en el expediente, la denunciante, una joven que no convivía en el domicilio del agresor, fue abusada mientras dormía en la cama matrimonial que Álvarez compartía con su madre. La situación ocurrió tras una cena familiar y fue agravada por la reacción posterior del acusado, quien intentó intimidar a la víctima para que no lo denunciara. Quedó constancia en el juicio también que la madre no contuvo a la víctima cuando le contó lo sucedido.

Inicialmente, Álvarez fue imputado por abuso sexual con acceso carnal, pero luego de analizar la prueba recolectada y con la admisión de los hechos por parte del imputado, la calificación legal fue ajustada a abuso sexual simple.

El caso llegó a la Unidad Fiscal de Investigaciones CAVIG después de que la víctima lograra contar lo sucedido a personal de su escuela. La directora y una preceptora la acompañaron a radicar la denuncia.

La condena a prisión condicional implica que Álvarez no cumplirá su pena en un establecimiento penitenciario, aunque deberá respetar una serie de condiciones establecidas por el tribunal. En caso de incumplirlas, podría revocarse el beneficio de la condicionalidad.

El fallo fue emitido tras un acuerdo de juicio abreviado que incluyó el reconocimiento del delito por parte del acusado, marcando un cierre judicial a un caso que generó conmoción en el entorno familiar de la víctima.