No la tuvieron fácil los delincuentes, porque los seis perros que había en la casa los enfrentaron aunque en el resultado final los animales perdieron, especialmente dos que terminaron muy golpeados y debieron ser llevados al veterinario. Allanado el camino, lo demás fue casi un trámite: porque de un depósito sustrajeron azadones, palas, horquetas. Y de otro, 10 lechones de 40 días, aún sin destetar.

"Estamos a unos 50 metros y escuchamos los perros pero los callaron a golpes y por eso no nos levantamos. Ya nos robaron como 10 veces en los últimos cinco años y llevarse esos 10 lechones sin destetar es hacer daño, porque no los van a poder mantener", dijo ayer Nora Ruggeri.

Todo pasó en la madrugada del lunes en la finca donde la mujer, que es docente, vive con su padre Emilio (87) en inmediaciones de Centenario y Arenal de Aparicio, en la zona de El Mogote, Chimbas.

"Es probable que usaran algo para que no gritaran los lechoncitos… los criaba mi papá para la casa y más que nada para entretenerse, porque a pesar de tener la enfermedad de Parkinson él sigue trabajando como lo hizo toda la vida. Todo esto le va a provocar un bajón grande", se lamentó Nora.

La tranquilidad fue la nota dominante en la finca donde Ruggeri crió con su esposa a sus cinco hijas. Allí cultivó, tuvo parrales y también un próspero criadero de pollos.

"De su propio trabajo realizó aportes durante 47 años para jubilarse, pero en los últimos años todo cambió cuando empezaron a robarnos. Pero no nos vamos de acá, vamos a mejorar la seguridad, poner cámaras y ver qué otra cosa para que no nos vuelva a pasar todo esto", dijo Nora Ruggeri. El caso fue denunciado en las seccional 17ma.