Violó a su hijastra a los 12 años hasta embarazarla; acepta 10 años de cárcel

La preocupación para la mamá saltó en julio de 2016, cuando su hija adolescente comenzó con diarreas y vómitos. Algo que le cayó mal, le dijeron en una salita de primeros auxilios. Posible hernia estimaron en el Hospital Marcial Quiroga, porque el ombligo le había empezado a sobresalir. Una nueva derivación al Hospital Rawson, el 30 de agosto de 2016, destapó la olla del horrible secreto: la nena, por entonces de 13 años, atravesaba todos esos problemas porque tenía 22 semanas de embarazo. Entonces los médicos le dijeron a la niña que le contara todo a su mamá y ahí la mujer supo que el padre de la criatura era ese changarín, hoy de 35 años, con el que había convivido 11 años, con el que tuvo también una hija y del que se había separado hacía dos años a causa de problemas insalvables en la relación.

Gran baldazo de agua fría: la mujer confiaba en ese sujeto que siempre se había llevado bien con su hija, que lo llamaba "papá" pese a no ser su progenitor biológico y que la conoció cuando ella tenía apenas 6 meses.

Ahora, el juez Juan Carlos Peluc Noguera debe decidir cuál será el monto de la pena.

Los psicólogos que entrevistaron a la niña en Cámara Gesell conocieron detalles más tremendos. La menor contó que todo pasaba en la casa del sujeto en Rivadavia, desde los viernes, cuando pasaba a buscarla por la casa de su madre, tras salir de la escuela, y la sometía hasta los lunes, cuando la regresaba para que volviera a ir a la escuela.

Que si contaba algo iría preso y se iba a matar, era la cláusula de terror que imponía para que el secreto no fuera develado.

Cuando la beba de la nena nació, el 9 de enero de 2017, un cotejo de ADN con el sospechoso sirvió para confirmar que la menor no mentía y que el changarín era el padre, pues la muestra genética arrojó un contundente 99,99% de probabilidad.

Por esa prueba, más que nada, que el changarín decidió admitir su autoría en los delitos de violación y corrupción de menores, agravados. A través de su defensor oficial acordó un juicio abreviado con la fiscal Leticia Ferrón de Rago, en el que acepta 10 años de cárcel. El juez Juan Carlos Peluc Noguera debe resolver.