A unos 50 metros, un vecino alcanzó a ver cuando dos sujetos se colaban por la ventana del rancho. Enseguida pidió a su mujer avisar a la policía mientras se sorprendía con una decisión inesperada de los ladrones: antes de huir, prendieron fuego. En instantes todo lo que había en dos dormitorios, una cocina comedor y un baño, quedó destruido por las llamas que avanzaron fácilmente por los palos y las cañas de las paredes y el techo.
Diego González (29 años, desocupado) no estaba en ese rancho que le prestaban desde hace un año atrás y en el que habita solo de día con su señora Maira Gómez (23 años, embarazada de 6 meses) y su nena de 2 años, porque desde hace unos 6 meses no tiene electricidad ni agua potable. Llegó a la carrera desde la casa de su madre ubicada en la misma zona en Albardón, pero nada pudo hacer: ayer enumeró que perdió dos roperos, dos camas, un televisor, un lavarropas, una cocina, su bicicleta, toda la vajilla y toda la ropa, entre otras cosas.
"No se conformaron con robar… tenían que prenderle fuego a todo estos hijos de p…", dijo ayer, indignado. Tras el siniestro, los ladrones corrieron unos 500 metros hasta el río, con su DVD, parlantes y el botiquín del baño.
Todo pasó el domingo alrededor de las 18.30 en callejón Albarracín, unos 100 metros al Oeste de General Acha, en La Cañada Sur, Albardón. Allí también se perdió una cama, una cocina, una bicicleta y una heladera de la mujer que prestó el rancho.
Los vecinos estaban indignados, porque aseguran que los delincuentes llegan en micro hasta el lugar, recorren la zona y entran a robar donde pueden. Ayer, aseguraron que por lo menos 3 vecinos más sufrieron robos en este año.

