Pudo significarle la muerte, pero su suerte quiso que la bala quedara alojada entre el cráneo y el cuero cabelludo. Así de afortunado fue ese joven de 22 años que dice que ayer a la tarde salió a comprar en el interior del barrio La Estación en Rawson y que, sin querer supuestamente, recibió un disparo en la cabeza en medio de una gresca entre dos patotas de esa popular barriada. Por el incidente detuvieron a un adolescente de 14 años, pero no secuestraron ningún arma de fuego.
El herido se llama Cristian Balmaceda (22) y anoche permanecía internado en el Hospital Rawson, según datos policiales. Su familia, que no quería hablar del hecho, sólo atinó a señalar que el joven estaba fuera de peligro y que iban a operarlo para extraerle el proyectil que tenía alojado en el parietal derecho.
La Policía informó que el enfrentamiento se desató ayer a las 14.30 entre dos grupos, de al menos 7 jóvenes por bando, en inmediaciones de las calles Frías y Torino de ese barrio. La versión que dio Balmaceda a la Policía, es que él era ajeno al incidente y que dio la causalidad que en ese momento salió de su casa para ir hasta un almacén a comprar. Fue en ese trayecto que se topó con la pelea y en medio del alboroto sintió un golpe en un costado de la cabeza. Creyó que se trataba de una pedrada, pero después se fue a su casa. Notó que le dolía y le salía sangre, por lo que la madre le miró la cabeza y, para sorpresa de toda su familia, descubrió que tenía un orificio de bala en el costado derecho del cráneo, explicaron fuentes policiales. De inmediato lo llevaron al Hospital Rawson, donde confirmaron que presentaba un balazo. Mientras tanto los policías de la Seccional 6ta dispersaron a los revoltosos y al único que pudieron detener fue a un adolescente de 14 años. No hallaron armas de fuego.