Una familia pocitana perdió prácticamente todas sus pertenencias a raíz de un incendio en su casa, iniciado en teoría por una falla eléctrica.

La desgracia comenzó cerca de las 22 de este domingo, en un rancho ubicado en el Lote Hogar 33, en Pocito. Allí vivía Paola Rivas (45) con sus dos jóvenes hijas y sus 5 nietos, de 7, 6 (mellizas), 4 y 3 años.

La versión de la familia indica que fueron los más pequeños los que se dieron cuenta que había llamas en la última habitación de la casa y empezaron a gritar. Gracias a eso todos pudieron salir a tiempo, aunque de igual manera sufrieron las consecuencias del humo.

El fuego se expandió rápidamente por todos los ambientes, destruyendo a su paso los muebles, aparatos, ropa y casi todas las pertenencias de los 8 habitantes de la casa.

Para ayudarlos, comunicarse al 2645446028. 

Los vecinos fueron muy importantes porque colaboraron con la familia arrojando agua para apagar las llamas. De todas formas mucho no se pudo hacer porque las pérdidas fueron casi totales, dijeron.

El siniestro fue tan dañino que se quemaron hasta las vacunas de un tratamiento que al nene de 7 años le indicaron para el asma que padece. Por esa condición su salud estuvo en riesgo y tuvo que ser asistido con oxígeno por personal de una ambulancia que llegó al lugar, al igual que el resto de los afectados.


Tanto Rivas como sus dos hijas trabajan como empleadas domésticas. Ahora para ellas todo se hizo muy cuesta arriba, teniendo en cuenta que la vivienda quedó inhabitable, puesto que parte del techo de cañas se vino abajo. Además, las paredes de adobes quedaron debilitadas y corren riesgo de derrumbe.

"Quedaron sin nada, es muy lamentable lo que ha pasado", dijo a este diario Ailén, hermana de Paola. Para ayudarlos, comunicarse al 2645446028.