Los hechos sucedieron en el año 2016 cuado la víctima tenía 16 años. La joven denunció haber sido abusada en una fiesta a la que asistió y este martes, el sujeto Alejandro Arroyo conoció su condena pero aún así no irá a prisión.
Según la investigación llevada a cabo por la UFI Cavig, los hechos ocurrieron una noche de agosto del año 2016. La víctima quien en ese momento tenía 17 años, asistió a una fiesta con amigas y amigos al domicilio de Rivadavia. Cerca de la 1 de la madrugada, la chica se sintió mal, por eso junto a una amiga se acostaron en una cama matrimonial que había en una de las habitaciones. Fue ahí que Arroyo ingresó a la habitación para calmar a la chica. "Sos muy linda para llorar por un chico" le dijo. Luego la abrazó, la besó, la sentó en sus piernas y le tocó los pechos por arriba y por debajo de la ropa.
Posteriormente bajó su mano y le tocó su zona genital por arriba del pantalón. Luego le bajó el pantalón y trató de bajarle la bombacha, pero no pudo. La víctima, sentía su cuerpo adormecido, sin fuerzas, "sentía asco", según el testimonio. En ese momento, alguien ingresó a la habitación, Arroyo la sacó de encima y luego la amenazó: "No vayas a decir nada. No te voy a violar. No te voy a violar", le exclamó. La chica recuerda que se subió la ropa y que luego se despertó en la misma cama.
Este martes en juicio abreviado se condenó a Arroyo a cumplir la pena de 3 años de prisión de cumplimiento condicional por el delito de abuso sexual simple, además de ciertas reglas de conducta.

