El 17 de marzo de 2013, Walter Tobal (35) murió a causa de los tres tiros que le dio Angel ‘Huevito’ Amado, por entonces de 17 años, durante un violento cruce en Villa Unión, Chimbas. La búsqueda del homicida para ajustar cuentas, incluyó el incendio de la casa del agresor, tiroteos y amenazas cruzadas, e incluso una ‘visita’ al cuñado del ‘Huevito’, Mauricio David ‘Peca’ Ramírez (23) que se salvó de milagro luego de recibir 4 disparos. El ‘Huevito’ volvió a quedar libre luego de un año de tratamiento por ser menor, pero no seguiría vivo por mucho tiempo: el 19 de enero de 2015 le tendieron una emboscada y un hermano de Tobal, Sebastián, se encargó de liquidarlo de 17 cuchillazos.
Ramírez se cobraría también sus ‘diferencias’ con el grupo rival. El 23 de abril de 2015, alrededor de las 20, supo que uno de sus supuestos atacantes, Carlos ‘Mauro’ Murúa (34) estaba en un salón que construía en Benavídez al 3.580 Oeste, en Rivadavia, le tiró una piedra a su Peugeot Partner para hacerlo salir. Y cuando lo consiguió, efectuó tres disparos: dos abollaron el vehículo; el tercero dio en el abdomen de Murúa y lo sentenció. Catorce días después, el 7 de mayo de ese año, murió.
Pero antes de correr esa trágica suerte, Murúa había dicho que el ‘Peca’ había sido su atacante, pero Ramírez se fugó y recién fue capturado en octubre de ese año.
Sebastián Tobal, homicida del cuñado de Ramírez, espera juicio
Ayer, Ramírez aceptó cumplir una condena de 14 años de cárcel, por ese crimen y también por tener ilegalmente un arma, un revólver calibre 22 con 6 cartuchos que le hallaron el 8 de marzo de 2013, tras protagonizar un choque en moto con otro motociclista en Benavídez y Cipolletti, en Chimbas, y darse a la fuga.
A través de su defensor, Horacio Merino, acordó un juicio abreviado con el fiscal Gustavo Manini. Ahora la juez Silvia Peña Sansó de Ruiz (Sala I, Cámara Penal) deberá aceptar el acuerdo y decidir. No podrá aplicar una pena mayor contra Ramirez.