‘Éramos los únicos que no teníamos luz en la cuadra y llamamos a Energía San Juan para que lo arreglaran. En ese momento no teníamos velas encendidas ni nada por el estilo… no queremos acusar a nadie, pero el incendio se produjo cuando los operarios arreglaban la línea eléctrica de nuestra casa’. Entre lágrimas, Mariela Peralta, una docente de 42 años, especulaba ayer con que el incendio que arrasó su casa en Pocito y los dejó en la calle a ella, sus padres y su hija de 15 años podría haber sido causado por unos operarios de una empresa subcontratista de Energía San Juan.
En minutos, las llamas arrasaron con la casa y todo lo había adentro: 3 camas, una heladera, una cocina, un lavarropas, una cinta caminadora, un juego de living, muebles, aparatos, ropa, dinero y documentación.
Ocurrió a las 21 del jueves en Calle 6 al 951 Oeste, a metros de la escuela Jorge Washington, Pocito. Allí viven José Peralta (80), su esposa Josefa Orellano (76), Mariela y su hija, de 15 años. La docente, quien da clases en esa escuela, contó que se habían quedado sin electricidad y tras hacer el reclamo, se fue a buscar a su hija a un colegio de Capital. En la vivienda quedaron sus padres y cuando llegaron los operarios, la pareja se puso a ver cómo trabajaban en el poste de la calle. ‘Mis padres me dijeron que los obreros se pusieron a manipular el cableado y cuando conectaron la luz de la casa, escucharon una explosión adentro. Parece que la heladera había quedado conectada y eso provocó un cortocircuito y el incendio. Vamos a esperar la pericia de la Policía para ver si realizamos o no alguna acción legal’, dijo Walter Peralta, hijo de los dueños de casa.
Vecinos y varios alumnos de la escuela trataron de apagar el fuego, pero fue inútil. ‘Lo peor de todo es que los bomberos se demoraron en llegar y encima un camión se les quedó sin agua’, dijo el hombre.