Un incendio intencional causó el último jueves un daño mayúsculo para varias familias jachalleras que habitan en las localidades de La Quebrada y La Falda. Según la Policía, cerca de 70 hectáreas de pastizales adyacentes al dique Los Cauquenes fueron consumidos y al menos 50 animales (equinos, vacunos, caprinos y bovinos) murieron quemados. Por si fuera poco, otros 50 animales seguían ayer desaparecidos.
Fuentes policiales informaron que el jueves a las 11.30 recibieron el llamado advirtiendo que alguien había aprovechado el viento Zonda para quemar malezas. Las fuentes explicaron que la gente de la zona suele hacer ese tipo de maniobras en esta época para desmalezar sus campos y así permitir el nuevo crecimiento de pasturas, alimento principal de sus animales.
Pero el fuego se descontroló y se extendió por las propiedades de las familias Bravo, Alcayaga, Sánchez y Guevara. También llegó a metros de la escuela Rubén Darío y de la capilla de La Falda, explicaron en la Policía. Por la amenaza de que las llamas alcanzaran las casas de los vecinos, unas 30 personas comenzaron a luchar contra el incendio. Al esfuerzo de la gente se sumaron unos 14 policías, de la Subcomisaría de Villa Mercedes, Bomberos de Jáchal, de la seccional 21ra, personal de Defensa Civil, de Fabricaciones Militares y del municipio, quienes contaban con el apoyo de 4 camiones hidrantes.
Tras varias horas de luchar contra el fuego, la gente logró controlar el siniestro alrededor de las 19 del jueves. Jorge Guevara, un vecino que perdió 3 de sus 6 cabras, dijo: ‘Esto es un desastre. Estos animales muertos no pudieron salir a tiempo y no sé qué pasó con 2 terneros, 2 chanchas preñadas y una yegua que tenía. No es la primera vez que ocurre un incendio de estas características en La Quebrada’. Desde la Dirección de la Producción entregaron fardos de pasto y chapas a los pobladores afectados.
Informe: Hugo Herrera, corresponsal.