Buenos Aires, 29 de julio.- Tras diversos allanamientos en la zona de Ensenada, se detuvo a un sospechoso, con antecedentes en su prontuario, que se encuentra en estos momentos alojado en la comisaría 2ª de La Plata.

Se halló además, en otro operativo, la motocicleta, una Yamaha modelo IBR roja, utilizada durante el asalto y tiroteo a Carolina Piparo, la embarazada que en estos momentos lucha por su vida en el Hospital San Roque.

Una pequeña buena noticia dentro de toda la tragedia es que el bebé, Isidro, pudo nacer sin complicaciones con ayuda de personal médico del Hospital.

Firmes indicios de un entregador

Tanto el juez César Melazo, el fiscal Marcelo Romero, fuentes de la Policía Bonaerense y la familia de la víctima confirmaron, cada uno por su parte, que existen firmes indicios sobre la existencia de un entregador en el interior del banco Santander Río de La Plata, por lo cual se citó a declarar al cajero que atendió a Carolina Piparo.

El esposo de la embarazada de 34 años baleada este mediodía en la vereda de su casa durante una salidera bancaria, confirmó también que sospechan del cajero del banco que les hizo entrega de $10.000 y u$s10.000 para la compra de una casa.

Juan Ignacio, esposo de Carolina, coincidió con que "ya estaba todo marcado". Según relató, su mujer había ido en el día de ayer a realizar la operación bancaria para avanzar con la compra de una propiedad. Llamativamente, el cajero del banco le indicó que no tenía disponible el dinero para entregarle y le pidió que volviera hoy, a las 11:30.

“Yo le dije que me resultaba raro, más teniendo en cuenta que tenemos una cuenta Premium en este banco…Pero ya estaba todo marcado. Ahora estoy completamente seguro de que hubo un entregador y hay una intervención directa del banco”, denunció.

Juan Ignacio, que confirmó que su esposa es empleada del Ministerio de Seguridad bonaerense, relató que Carolina no se resistió en ningún momento al asalto y pese a ello los delincuentes la hirieron de dos balazos cuando ella ya estaba en el piso. “ Le perforó un pulmón y la bala quedó alojada allí abajo”, ahondó.

Precisamente luego de esto fue que Carolina Piparo fue baleada en su casa. Según confirmó Juan Ignacio momentos antes de desfallecer, su mujer acusó: "Fue el cajero, fue el cajero".

Por su parte, el hermano de la víctima, remarcó que Carolina "no se resistió". "Ella dijo tomá lo que quieras, no me hagas nada", aseguró y, aún a pesar de ello, fue acribillada. "Mi hermana está al borde de la muerte", lamentó.

El fiscal a cargo del caso, Marcelo Romero, había señalado en diálogo con C5N que "la hipótesis del entregador es una hipótesis firme". Remarcó además que los dos delincuentes que perpetraron el hecho "tenían información concreta".

Momentos antes, el juez de Garantías de La Plata, Cesar Melazo, señaló por C5N que el juzgado "se hizo presente en esa sucursal del banco Santander de La Plata para solicitar las filmaciones y la información sobre los empleados que estuvieron presentes en el local ayer y hoy, para descartar o no participación en el hecho".

"Se trata de un caso de salidera bancaria y estamos investigando la participación activa o indirecta de alguien dentro de la institución o de quien sea", subrayó el juez Melazo.

El caso

Carolina Piparo había concurrido ayer a una sucursal del banco Santander Río de la ciudad de La Plata para retirar, según el esposo, $10.000 y U$S 10.000 para la compra de una propiedad.

El cajero que la atendió le dijo, según declaró el esposo de la embaraza, Juan Ignacio, que volviera a un horario determinado, al día siguiente. Hecho esto, Piparo fue atacada por motochorros cuando bajaba del auto hacia su hogar .

Arrastrada fuera del auto, uno de los dos asaltantes la arrojó al piso y, tras robarle la cartera con el dinero, le disparó en la boca y a la altura del pecho.

Momentos antes de desmayarse, Carolina habría acusado, según palabras de su hermano, a quien la atendió en la sucursal del banco. "El cajero, el cajero", señaló, entre lágrimas.

Ya en el Hospital San Roque, personal médico logró salvar a su bebé, Isidro, quien nació sin complicaciones con un peso de 3 kilos 400 gramos. Carolina, por su parte, lucha en estos momentos por su vida.