Un terrible caso de abuso sexual tuvo su resolución a través de un juicio abreviado en el Sistema Acusatorio. Un anciano fue condenado a diez años de prisión domiciliaria por haber violado a una nieta cuando era niña.

Según fuentes judiciales, los hechos ocurrieron desde que la víctima, actualmente de 16 años de edad,  tenía 6 y hasta haber alcanzado los 11. Tuvieron lugar en la casa donde convivía junto a su abuelo paterno en los momentos en que no se encontraban sus padres. Allí, el acusado aprovechaba para tocarle sus partes íntimas por arriba y por abajo de la ropa, practicarle sexo oral y someterla a que haga lo mismo con él.

Este miércoles, el sujeto fue condenado a por abuso sexual gravemente ultrajante reiterado y corrupción de menores agravadas por el vínculo. Recibió la pena de 10 años de prisión efectiva de cumplimiento domiciliario, acuerdo que fue homologado por el juez de garantías en virtud de que de manera excepcional el Ministerio Público Fiscal ha consentido dicha modalidad por contar el imputado con 86 años y padecer de enfermedades terminales siendo oxígeno dependiente.