Tenía 72 años Juan Carlos Loyola, tres hijos, y cada tanto le daba por irse en bicicleta a Mendoza, porque allí vive su hija. Se cree que esa fue la razón por la cual a las 2,30 de ayer enfilaba por Ruta Nacional 40 rumbo al Sur, en Pocito, muy lejos de su casa en Rivadavia. La diferencia, esta vez, fue que su intención se truncó para siempre en Carpintería. Y de una manera macabra, pues lo atropelló un pequeño camión con cámara frigorífica y luego otros dos autos, dijeron fuentes policiales y judiciales. "Quedó irreconocible, destrozado", describió uno de los pesquisas del caso.
Todo pasó sobre las 2,30 de ayer a la altura del kilómetro 29 de la Ruta 40, entre calle Nueva y el callejón Los Alamos, unos 400 metros antes de la gran grieta que se abrió en la ruta con el último gran terremoto, indicaron.
Fiscalía determinará si cabe o no imputar homicidio culposo a los dos conductores
A esa hora, Loyola transitaba hacia el Sur. Y también lo hacían en la misma dirección Miguel Casilla en un camión Mercedes Benz con caja térmica y detrás David Sillero al mando de una Volkswagen Saveiro, informaron voceros del caso.
La principal hipótesis, ayer, era que el camionero no vio al anciano porque iba por el medio de la calle y la zona estaba muy oscura. Tras el primer impacto, el hombre habría sido arrastrado unos 10 metros por el camión. Y como quedó tendido sobre la ruta, el conductor de la camioneta Saveiro "le pasó por arriba", y también el chofer de otro vehículo que siguió de largo, precisaron.
Instantes después del siniestro, se hizo presente en el lugar el coordinador de la UFI de Delitos Especiales, Adrián Riveros, con sus colaboradores, personal de Criminalística y de la subcomisaría Castro.
Recolectaron todas las pruebas para determinar un punto para nada menor en la investigación: saber si el camionero y el conductor de la Saveiro deberán o no responder por un posible homicidio culposo (matar sin intención), un delito que es excarcelable.