El análisis de la prueba ventilada en el juicio oral y público, le dejó al juez Raúl José Iglesias (Sala I, Cámara Penal) una certeza inconmovible: que Jorge Fabián ‘Quico’ Posse (42), su hijo Jorge Rodrigo ‘Chucky’ Mercado (22) y Alejandro David Zappalá (31) fueron coautores del robo de un millón de pesos a punta de arma en las oficinas de la estación de servicio de la firma ‘Sánchez Huerta’ de Rawson y San Lorenzo, entre las 13 y las 14 del 21 de enero del año pasado. Ese día, huyeron con 300.000 pesos, 40.000 dólares, un millón de pesos chilenos, 57 cheques y monedas, que cargaron en bolsas negras y mochilas.
Por eso condenó anoche a Posse y a Zappalá (entonces era empleado de Sánchez Huerta) a 7 años y 6 meses de cárcel. Y castigó con 6 años a Mercado.
En su resolución el juez absolvió por el beneficio de la duda al cuarto acusado de ese sonado caso, el comerciante Carlos Marcos Zappalá (55) y ordenó su libertad inmediata. También mandó a que se investigue (lo pidieron la defensora Vanesa De Dax y el defensor oficial Alejandro Martín García) si los policías que investigaron cometieron apremios ilegales u otros vejámenes, y si médicos y funcionarios judiciales no hicieron nada al respecto, tal como dijeron todos los acusados.
Por la mañana, en sus alegatos, la fiscal Marcela Torres había pedido 11 años para Posse (tiene varias condenas), 9 para Alejandro Zappalá y 7 años para Mercado. También pidió investigar a otro Zappalá, Marcelo, que ya había sido desligado, indicaron.
En cambio, todos los defensores solicitaron la absolución de sus defendidos.
El defensor oficial Carlos Reiloba solicitó desligar al mayor de los Zappalá por falta de pruebas y el juez le dio la razón.
Federico Petrignani fue el más incisivo y planteó anular el proceso prácticamente desde la raíz, pues a su entender su cliente (Alejandro Zappalá) había sido detenido por decisión policial y sin orden judicial dos horas antes de que allanaran su casa, ya con mandato por escrito del juez. Dijo que su cliente fue una víctima más del robo y no cómplice.
De Dax y el defensor oficial Martín García plantearon una nulidad, con el argumento de que el principal testigo, uno de los dueños de ‘Sánchez Huerta’, fue inducido a reconocer a Posse y su hijo como asaltantes. Anticiparon que reclamarán en la Corte.