Buenos Aires.- José Pedro Calegari cayó preso esta mañana en su casa de General Rodríguez no solo por ser acusado de un crimen nefasto, sino también por un error decididamente estúpido. Días atrás, tenía que enviarle a un vecino un video vía Whatsapp: envió el video equivocado. Su vecino, amigo de años, estaba atónito mientras le mostraba la filmación a su mujer. En su celular, en una secuencia de pocos segundos, dos nietos de Calegari se tocaban entre ellos. Y Calegari mismo dirigía la acción. Su vecino no dudó en denunciarlo ante la comisaría local.

La UFI descentralizada Nº9 de Luján con la fiscal Alejandra Rodríguez a cargo del caso comenzó a tomar testimonios en el barrio. Lo peor de todo es que en su cuadra en General Rodríguez esto ya se sabía. El hombre, un jubilado de 65 años que complementaba sus escasos haberes como remisero en un viejo Volkswagen Senda, contaba sobre sus supuestos abusos a otros vecinos. Sin embargo, nadie quería tomarlo en serio, aseguraron fuentes directas del caso a Infobae. La denuncia penal en su contra cambió todo.

Cuando efectivos de la Coordinadora de Investigaciones (CDI) de Moreno-General Rodríguez de la Policía Bonaerense a cargo del comisario Javier Cardozo rodearon su casa de la calle Guillermón al 200 del barrio San Bernardo para llevárselo, Calegari no opuso resistencia ni dijo demasiado. Todo ocurrió frente a su mujer, que afirmó no saber nada.

Así, el jubilado quedó detenido con la gravísima imputación de abusar de sus nietos de 6, 8 y 13 años, a quienes cuidaba mientras sus padres, que viven detrás de su propiedad, trabajaban durante el día. A Calegari se lo acusa no solo de someterlos, sino de también filmar los actos. ‘Los chicos se tocan entre ellos en los videos. Se puede ver sexo inclusive’, asegura una voz clave de la investigación.

La casa fue minuciosamente registrada: se hallaron al menos tres videos en un celular que lo incriminan, así como la colección de pornografía de Calegari. Incluye DVD con sexo explícito, fotos de hombres mostrando su pene y hasta muñecas tipo Barbie desnudas y desmembradas. También se halló una cámara de fotos, que será peritada. Los menores, por su parte, enfrentarán una cámara Gesell. Mientras tanto, el hombre espera en la CDI para ser transportado e indagado por el Juzgado de Garantías que interviene en el expediente.