Un hombre que tenía una condena condicional por agredir a su expareja recibió otro castigo, por volver a atacarla. Esta vez lo condenaron a 8 meses de prisión, pero le unificaron las penas y le aplicaron una única de 1 año y 3 meses de cárcel.

El fiscal del caso fue José Plaza, de la UFI Cavig. El imputado se llama Néstor Ariel Calívar Guerrero, quien en un juicio abreviado aceptó el castigo por el delito de lesiones leves agravadas por el vínculo (dos hechos) y amenazas. A Calívar le revocaron la condicionalidad de una condena anteriormente impuesta por un juez de Flagrancia (de 7 meses de prisión) y ordenaron la unificación de las penas, debiendo cumplir un castigo único de 1 año y 3 meses de prisión de cumplimiento efectivo, dijeron fuentes judiciales.

Hechos

La denunciante manifestó que el 17 de febrero de 2022, siendo las 22.30, cuando iba saliendo del lote hogar donde vivía, en La Bebida, Rivadavia, se encuentró a su ex pareja, Néstor Ariel Calívar Guerrero, quien conducía una bicicleta. Sin mediar palabras, se llevó a su hijo, mientras que la víctima decidió ir a la casa de su madre, encontrándose en el camino otra vez a su ex, quien comenzó a decirle, delante del menor, "vos andás c… por ahí y dejás al niñito solo…". El sujeto en ese momento se acercó a ella y le dio un golpe  con el revés de su mano en el pecho. El niño al ver esta situación se puso a llorar, y le decía a su padre que no le pegara. La mujer siguió caminando mientras le decía que se fuera, pero no se iba y en ese momento le dio un golpe de puño en su ojo derecho. El hijo de la víctima estaba atrás de ella y, producto del golpe, cayó al suelo junto al niño.

La víctima dijo que la relación con el imputado duró 8 años y que tienen dos hijos en común menores de edad

En otra denuncia, la víctima expuso que el pasado 3 de enero discutió con su expareja porque se quería llevar a uno de los menores y que a la una de la mañana del día siguiente regresó y la golpeó en la cara. Ella cayó al suelo perdió el conocimiento por unos minutos y cuando logró recuperarse, se levantó, con la frente hinchada. Según la denuncia, le dolía mucho la cabeza, se fue a acostar y comenzó con vómitos, por lo que le dijo a su ex que necesitaba ir al hospital. Luego, a las 11 se despertó y le seguía doliendo la cabeza, si se levantaba se mareaba, pero a él eso no le importaba. Es más, comenzó a agredirla nuevamente y, tomándola del cuello, la amenazó de muerte.