El juez Juan Pablo Chirinos, que investiga la muerte del gobernador de Río Negro, Carlos Soria, confirmó ayer que la esposa del difunto mandatario, Susana Freydoz, está ‘imputada, no procesada’ por el hecho, pero sigue en libertad.

En tanto, por la tarde el titular del Superior Tribunal de Justicia de Río Negro, Víctor Sodero Nievas, aseguró que el caso ‘está resuelto en un 70 por ciento’, que se trabaja en la hipótesis de la ‘emoción violenta’ de Freydoz, y destacó que la mujer habría dicho tras la muerte de Soria: ‘No quise matarlo’. Soria murió de un disparo en la cara este domingo.

El fiscal Miguela Angel Fernández Jahde aseguró ayer que será la investigación sobre la muerte de Carlos Soria en la ‘se podrá determinar si hubo una emoción violenta’ la esposa, en lo que pareció una réplica a los dichos de Sodero Nievas, al hablar ambos por televisión.

‘Las discusiones entre la pareja venían desde la campaña (para la gobernación de Río Negro)’, señaló Sodero Nievas.
El juez indicó que Freydoz no declarará todavía: ‘Nos llamó su médico particular. Hasta que no esté en condiciones psiquiátricas de poder prestar declaración indagatoria va a estar en esta situación de imputada no procesada‘.

Sodero Nievas aseguró que en la pareja había situación de ‘hartazgo’ de parte de ella a raíz de las desavenencias. Afirmó que no puede asegurar que ‘el gobernador haya sido un golpeador‘, pero sí ‘tenía una personalidad fuerte’.