Una joven mamá quiso hervir agua para preparar la leche a su bebé y se desató un incendio en la cocina de su casa. Fue por una fuga de gas en una hornalla. La chica con su bebé en brazos y su marido tuvieron que escapar mientras ardían sus muebles y artefactos. Lo insólito es que, cuando salieron a la calle a pedir auxilio, hicieron señas a unos policías que pasaban en un patrullero y éstos no se detuvieron, según denunciaron.

El incendio, registrado a las 0.30 de ayer, destruyó muchas de las pertenencias de Javier Páez (27), su esposa Mélani (21) y su hijo de 8 meses. Para colmo, esa casa de calle Mendoza casi Comandante Cabot, en Trinidad, Capital, era prestada. 
El muchacho relató que su mujer prendió la cocina y regresó al dormitorio. ‘No se dio cuenta, pero había una pérdida de gas en la hornalla. Al ratito volvió a la cocina y se encontró con las llamaradas. Ya estaban ardiendo las cosas’, relató Páez, quien es obrero de la construcción.

‘Les gritamos y les hicimos señas a los policías. Y los sinvergüenzas pasaron de largo’.

Javier Páez – Damnificado en el incendio

‘Yo atiné a sacar a mi mujer y a mi hijo. No podíamos hacer nada, así que escapamos a la calle. Lo que más bronca que da es que, en nuestra desesperación, empezamos a gritar para pedir ayuda porque no teníamos ni los celulares para llamar. En eso venía un patrullero. Mi mujer y yo, en calzoncillos, les gritamos y les hicimos señas a los policías. Y los muy sinvergüenzas pasaron de largo y no se pararon a ayudarnos‘. Aunque después llegaron los bomberos, perdieron muebles, la cocina, una heladera, dos aires acondicionados y otros electrodomésticos. La cocina quedó destruida por el fuego y parte de la casa también se daño por el hollín.