De un lado está la certeza de que alguien entregó los datos con pelos y señales de quién era el beneficiario del pago, el día que cobraba y la sucursal bancaria. Y del otro, la presunta negligencia de la cajera por no controlar la documentación que le exhibían. Con esto jugó un desconocido que ayer se hizo pasar por un jubilado que debía percibir un retroactivo en la sucursal Rawson del Banco Nación y que se llevó cerca de 40.000 pesos usando un DNI falso, informó la Policía.
Lo increíble es que la maniobra se cometió casi en las narices del verdadero beneficiario de ese pago. Porque mientras el estafador cobraba el dinero por ventanilla alrededor de las 8.30, el verdadero Norberto Antonio Cuenca (el jubilado que debía cobrar) hacía la cola, tres o cuatro lugares atrás, informó la Policía. De hecho, cuando este jubilado de 62 años llegó a la caja y mostró la documentación para percibir sus 38.393 pesos, la cajera no supo qué decirle. “No sabía qué pasaba. La chica iba y venía, y miraba los papeles. Después se fue. A los minutos vino el gerente y dijo: “usted ya cobró”. “¡¿Qué?!”, le respondí, “¿cómo que ya lo cobré? ¡Recién llego!”, realmente me puse mal”, recordó Cuenca, un obrero de la construcción que esperaba cobrar los 20 meses que le adeudaban desde que inició el trámite de su jubilación en la Anses. Los empleados de la sucursal bancaria de Boulevard Sarmiento, Villa Krause, recién ahí se dieron cuenta de la estafa y que otro había cobrado en nombre de Cuenca. De hecho, el jubilado contó que le mostraron la fotocopia (que sacó la cajera) del DNI que usó ese sujeto y tenía el mismo nombre y número de documento suyo. Según la Policía, aparentemente fraguaron un DNI y el estafador puso su foto. Esto último revela que la maniobra fue posible porque contaban con información del jubilado y sabían que ayer le pagaban. Cuenca explicó: ‘No puedo acusar ni juzgar a nadie. La única que sabía del pago era mi abogada. La semana pasada yo le avisé que hoy (por ayer) cobraba y le dije quería ir al banco a las siete y media, pero ella me pidió que fuera a las ocho y media”. En la Policía sospechan que los datos también pudieron filtrarse en el Anses en el banco.

