La resonante causa judicial donde se investiga la presunta prostitución de una menor tuvo ayer un punto de inflexión cuando la jovencita de 14 años en Cámara Gessell dijo que tuvo sexo con el dirigente social Roberto "Fido" Galván y con el empresario Carlos Cassab a cambio de dinero, todo supuestamente con la ayuda de la tía de la chica, quien creen que fue "facilitadora".
Con este escenario, todo indica que los fiscales pedirán que los dos acusados de tener relaciones con la menor cumplan una pena de prisión efectiva. Para esto se deberá agravar la figura de estupro -tener una relación sexual con una persona menor de edad y valerse de su inmaduréz sexual-, y que entren a tallar elementos como el daño psicológico que esto generó en la víctima.
Plata y regalos para el cumpleaños de 15 eran la moneda de cambio que estos dos sujetos ofrecían a cambio de acostarse con la adolescente. La menor habló de 30.000 pesos.
Además de la declaración de la menor, ayer también el juez subrogante Andrés Avelín (se apartó el magistrado Matías Parrón) decidió mandar a un calabozo de la Central de Policía a Cassab y así sacarlo de una habitación del Hospital Marcial Quiroga en la permanecía casi desde el minuto cero de su detención. También, ante el pedido de la defensa de la tía que proponía trasladar a la mujer al Hospital Mental de Zonda por problemas previos, le negó esa posibilidad y seguirá presa en la Comisaría 28va.
El caso había estallado la semana pasada, luego de que la madre de la niña supiera que era prostituida y que su hermana facilitaba el comercio sexual de su hija. Puso la denuncia cuando la propia chica le confirmó que era así. Y desde entonces se motorizó una investigación que concluyó con la detención de los tres sospechosos y el secuestro de sus teléfonos y otros soportes informáticos que, suponen, podrían no sólo confirmar los dichos de la menor sino también arrojar evidencia sobre otros posibles implicados.