La Justicia reconstruyó cómo ocurrió el triple crimen de Mendoza, la masacre que terminó con la vida de Alejandra Ferreyra (48), Karen Arenas (22) y Yariel Bruno (4) y por el que Ezequiel Ledesma (23) fue imputado imputado por doble femicidio y un homicidio criminis causa. Podría recibir la pena de prisión perpetua.
Luego de unir los testimonios recogidos en el barrio Bandera Argentina, los investigadores lograron armar el ‘rompecabezas’ para conocer cómo fueron las últimas horas de las víctimas. Los detalles de la terrorífica noche fueron dados a conocer este martes en una conferencia de prensa otorgada por el fiscal a cargo de la investigación, Carlos Torres.
Según los investigadores,a las 22.04, Karen actualizó su perfil de WhatsApp con un foto en la que se ven a las tres personas que luego serían encontradas degolladas. “Estamos los tres en la cama”, publicó la joven en un mensaje que recibió a esa hora María, una vecina que vive enfrente a la casa 18 de la manzana F.
Unos minutos antes, a las 22, Ezequiel entró a la casa de su novia Karen, según el relato del testigo clave. “No tenía llave, alguien la abrió”, detalló Torres. Luego, se escucha una discusión entra la pareja, que dura pocos minutos. A partir de ese momento todo queda en silencio.
A la 1.30. Llegó al domicilio Janet (24), madre de Yariel e hija y hermana de las otras mujeres ultimadas. La joven había salido de su hogar para cenar con una amiga. Janet no nota nada raro, se dirige a una de las habitaciones y se topa con el peor cuadro imaginable: toda su familia, incluido su pequeño hijo, están muertos y bañados de sangre.
Cronología
Los peritos establecieron que el asesino primero atacó a Karen, quien se movía en una silla de ruedas, luego a Alejandra y por último al pequeño Yariel. “Todos tenían heridas punzo penetrantes en el cuello”, describió el fiscal. Todos los indicios marcan que un solo asesino actuó la noche del domingo en la casa 18.
Luego, se presume, que Ezequiel se fue a su casa, que se encuentra unos 50 metros de la vivienda del crimen. Pero antes se higienizó e intentó limpiar la escena.
Los celos, principal sospecha del móvil del crimen
“El móvil del crimen fue la ruptura de la pareja”, dijo el fiscal Torres anta la prensa. Karen y Ezequiel llevaban dos años de novios, pero la noche de la masacre, la joven habría intentado poner fin a esta relación. Situación que despertó la furia del acusado.
Según amigos y allegados de la pareja. Ezequiel era muy celoso y agresivo. “Nosotros nos juntábamos siempre con Karen en su casa, Ezequiel la celaba y se iba indignado”, relató unos de los amigos de la victima a este diario.
Fuente: Minuto Uno