Un carnicero que se detuvo ayer en la tarde en su camioneta frente a un local muy conocido de Capital, cometió un descuido que le salió muy caro. El hombre se bajó a comprar y ni siquiera le puso llave al rodado. Y ese olvido fue aprovechado por alguien que sólo tuvo que abrir una de las puertas del vehículo para sustraerle un celular, un GPS (Sistema de Posicionamiento Global) y nada más y nada menos que 40.000 pesos, informaron fuentes policiales.
El damnificado fue identificado en la Policía como Fabio Yubel (39), un carnicero que tiene su negocio en Concepción. Ayer este diario intentó obtener una declaración de Yubel, pero se excusó de dar cualquier información.
El de ayer no fue el primer hecho de inseguridad que sufre el carnicero. En mayo de 2011, Yubel y un empleado terminaban de atender a un cliente en la carnicería cuando dos sujetos los encañonaron. Al comerciante lo golpearon y le robaron un celular y 16.000 pesos que tenía para pagarle a un proveedor. Tras el ataque, los ladrones huyeron en una moto.
Fuentes policiales indicaron que ayer a las 17, Yubel estacionó su camioneta Ford Ecosport frente a un negocio de cerámicos situado en calle Salta, al Sur de Santa Fe, en Capital. Aparentemente, el hombre iba a realizar una compra en ese local y se bajó del rodado. Había dos puntos que a los pesquisas no les cerraba: el primero, que nadie viera al ladrón cuando robada en una zona tan transitada y el segundo, que el damnificado no activara ni echara llave al vehículo cuando se bajó, explicaron.
Lo concreto es que en ese lapso alguien le abrió la camioneta y le robó los 40.000 pesos que dejó en el interior. También, le llevaron un celular y un GPS, dijeron fuentes policiales.

