La puerta lateral de la vivienda violentada, a pesar de la traba interna que le habían puesto. Y, adentro, un desorden muy puntual en el dormitorio. Cuando los dueños de casa se toparon con ese cuadro y descubrieron que el foco de atención de él o los delincuentes estaba en esa habitación, surgieron los más desalentadores pensamientos que enseguida se confirmaron: la plata, los 8.000 pesos ahorrados con muchos sudores en la tierra, habían desaparecido del ropero.

Y así lo que había empezado como una salida para celebrar terminó en una noche amarga para el agricultor David Lara (58) y su familia. Todos se habían ausentado el viernes alrededor de las 19.30 para participar de la procesión y otros actos por las fiestas del patrono del departamento Jáchal, San José, y al volver, alrededor de las 22 de ese mismo viernes, se toparon con desagradable sorpresa, dijeron fuentes policiales y el mismo Lara.

Esa misma noche y aún el sábado Lara, por los nervios, no pudo precisar la cantidad de dinero que le habían robado pero ayer llegó a la comisaría 21ra. para detallar con precisión que había perdido 8.000 pesos conseguidos con la venta de pasto y otros productos de la tierra.

Apenas se conoció el caso, en la policía se pusieron a indagar en el círculo más íntimo de la víctima, porque están convencidos de que quien robó sabía lo que buscaba y dónde estaba escondido, dijeron ayer los pesquisas.