Desconocidos arrojaron un líquido inflamable y prendieron fuego a un auto estacionado en la puerta de una vivienda del barrio ATSA, en Rivadavia. Descartan que haya sido un incendio accidental porque el coche no tenía batería. El vehículo es de un hombre que permanece internado en terapia intensiva. Uno de sus hijos no sabe a qué atribuir el atentado incendiario, ya que aseguró que son una familia de trabajadores y no mantienen conflictos con nadie.
Yolanda, la dueña de casa, estaba sola y dormía a eso de las 3 de la mañana de ayer, cuando se despertó sobresaltada al escuchar un estruendo en la entrada de su vivienda en calle 21 de Septiembre, entre Velázquez y Sanidad Argentina, en el Bº ATSA. La mujer, desesperada, se asomó a la ventana y ahí observó que el auto Ford Falcon de su marido, Santiago Chirino, empezaba prenderse fuego. Un vecino que también oyó la explosión y que salió a la vereda a ver qué pasaba, comentó que observó que ardía el techo del vehículo y que la luneta tenía un hueco producto de una rotura, relató después Mauricio Chirino, hijo del propietario del coche.
Yolanda de Chirino llamó a sus hijos, que no tardaron en llegar; a todo eso los vecinos de esa zona salieron corriendo con los baldes de agua para sofocar el incendio. ‘Menos mal que no estalló el tanque de gas y el fuego no llegó a la casa. Mi mamá se llevó un gran susto’, decía aliviado Mauricio. El hecho fue otro golpe para los Chirino, cuyo padre está en terapia intensiva por un edema pulmonar. Meses atrás había tenido tres infartos.
El fuego destruyó todo el interior del auto, el motor y el baúl, y la chapa quedó muy dañada. Lo único que salvaron en parte son las ruedas de ese Ford que estaba valuado en algo de 45.000 pesos.
‘Esto fue intencional, pero no sé por qué a nosotros. No tenemos problemas con nadie’, explicó Mauricio. Si bien el auto es de su padre, habitualmente lo maneja su hermano Sebastián, quien es padre de familia y tampoco tiene conflictos con alguna persona, contó. Los bomberos dijeron a los Chirino que el fuego fue intencional. Era imposible que existiera una falla eléctrica porque le habían sacado la batería.

