Ardua tarea. Los efectivos que participaron en el operativo pasaron más de 12 horas en el lugar, pues tuvieron que contabilizar una gran cantidad de productos repartidos en dos pisos de la vivienda.

 

Efectivos de la Agencia Regional Cuyo de la Policía Federal allanaron ayer un domicilio céntrico donde se vendían suplementos deportivos usados para mejorar el rendimiento físico y aumentar la musculatura, dijeron fuentes policiales. Y el caso acarreó una fuerte polémica, pues una versión señalaba que allí también existía el comercio de sustancias prohibidas, pero su familia negó de plano esa situación.

El sospechoso es Eduardo Jesús Gari. Según la Policía, traía los productos del exterior y cayó por violar el código aduanero (Ley 22.415).

El operativo contó con la participación de la División Narcóticos de la Policía Federal, personal de AFIP y Aduana y se ejecutó en una casa de Entre Ríos 186 Norte. Comenzó al mediodía y hasta anoche los efectivos todavía no terminaban de contabilizar todos los productos que había en ese lugar. Es que eran dos pisos (abajo funciona el garaje) con estanterías repletas de proteínas, sales y otros suplementos. A última hora de ayer, los pesquisas llevaban contabilizadas más de 50 cajas completas con esa mercadería, informaron las fuentes.

Si bien una versión indicaba que en el lugar Gari también tenía esteroides anabólicos de venta prohibida, la familia salió a desmentirlo. De ser cierta esa versión, el sospechoso quedaría más complicado ya que en Argentina está prohibida la venta libre de ese tipo de productos, y sólo está permitido su expendio bajo prescripción médica, explicaron los voceros. "No son narcóticos ni mucho menos sustancias prohibidas. Sólo fue un problema de importación", sostuvo una hermana de Gari. Según los investigadores, Gari es conocido en el ambiente de los gimnasios y sólo se dedicaba a vender a conocidos. La causa quedó a cargo del juez Leopoldo Rago Gallo, del Juzgado Federal Nº2.