Fue la peor noche para Marcelo Montiveros. No sólo porque la tormenta de viento y tierra del martes a la noche lo sorprendió fuera de casa; sino también, porque cuando por fin pudo regresar, tuvo la desgracia de atravesarse en el camino con dos ladrones. Casi lo ahorcan por sacarle el casco, después le pegaron y por último le metieron una puñalada en la pierna para quitarle su moto.

‘Me llevé un susto muy grande, pero si no sacan la punta no hubieran robado la moto porque yo no la quería largar’, contó Marcelo Osvaldo Montiveros (50), un desocupado de Villa Mancini que vive de un plan del Gobierno. El martes a la noche, él había ido en su Maverick 110cc a la casa de una amiga al asentamiento Pedro Echagüe, Santa Lucía. El viento y la tierra obligó a que se quedara hasta la medianoche en ese lugar. ‘Cuando se aplacó el ventarrón, salí con la moto para volver a mi casa. Me fui por una calle y vi a dos muchachos, pero no imaginé que me iban a robar. Pero se me vinieron en medio de la oscuridad y, cuando yo pasaba, me pegaron en la cabeza’, describió Montiveros.

Uno de los ladrones empezó a tironearle del casco, al punto que casi lo estrangula con la correa. ‘Tuve que desprendérmelo porque si no me ahorcaba. Con el mismo casco después me golpearon en la cabeza y la cara, pero yo seguía agarrando la moto’, agregó. En ese momento sintió el cuchillazo arriba de la rodilla izquierda. Ahí, Montiveros soltó su Maverick y los desconocidos aprovecharon para montarse en el rodado y fugar.

La víctima luego fue llevada al Hospital Rawson por los golpes en la cabeza, un pequeño tajo en la nariz y la herida punzante. Su moto, ayer en la tarde fue encontrada por policías de la Seccional 29na abandonada en una acequia en Italia y Aconcagüa, Santa Lucía.