La jueza de Garantías, Gema Guerrero, consideró ayer que inhabilitar al empresario José Osvaldo Rampulla (74 años), sería violatorio de sus derechos y garantías constitucionales y un adelanto de pena en esta etapa de la investigación (que formalmente empezó ayer) y la llevaría a valorar hechos y circunstancias del caso que podrían hacerla caer en la parcialidad. Por eso, decidió rechazar el pedido del fiscal coordinador, Adrián Riveros, y su ayudante fiscal, Leonardo Arancibia (UFI de Delitos Especiales) para quitarle la licencia de conducir e impedirle manejar por dos meses al empresario, como medida preventiva, mientras se lo investiga por el presunto homicidio culposo de Melina Alfaro, una joven que tenía 21 años y un embarazo de 4 meses cuando fue atropellada por Rampulla en su auto Mercedes Benz.
El hecho ocurrió el viernes pasado, a eso las 20.30, en Ruta Nacional 40, entre 5 y 6, en Pocito. A esa hora, la joven cruzaba la ruta desde su casa en el barrio Lagares hasta la de su abuela en Villa Huarpe. Ese día Rampulla volvía a su casa en Capital, pero decidió volverse a cargar combustible en la estación de servicio de calle 6.
Ayer, Rampulla no declaró por consejo de su defensor, Federico Petrignani.
Tras dar a conocer sus argumentos, la magistrada liberó a Rampulla y sólo "tuvo presente", por el incipiente estado de la causa, un pedido de los abogados de la familia, Jorge Guillén y Cecilia Ferré, para agravar el delito de homicidio culposo que le imputó Fiscalía al empresario, pues entienden que luego de atropellar a la joven no le prestó ningún auxilio.
Dolida por la trágica pérdida de la mayor de sus cuatro hijos, Marta Alfaro volvió a pedir justicia: "Entiendo que sea mayor (Rampulla), pero son dos muertes y él nunca frenó. Espero que esto no quede impune para que este hombre no siga con sus manipulaciones", dijo la mujer.
Melina era la mayor de sus hijos y era clave en el andamiaje de su familia, pues le ayudaba con su hija discapacitada de 19 años y sus otros hijos, una chica de 15 y un varón de 14. Tres días antes del accidente, Melina había conseguido trabajo como cuidadora de una abuela enferma y andaba feliz, por eso y por el hijo que esperaba, ese ser tan especial para ella por el que tantas veces cruzó la ruta para hacerse controles en la salita de primeros auxilios de la Villa Huarpe, contó una de sus familiares.
Mientras es investigado, Rampulla deberá someterse al proceso y presentarse en una comisaría.