En el Penal de Chimbas no se pudo localizar al director ni al subdirector. En el Ministerio de Gobierno fue imposible obtener una declaración de Emilio Fernández y mandaron a decir que el secretario de Seguridad, Dante Marinero, iba a hablar. Sin embargo, éste último tampoco quiso atender. Así, uno a uno los funcionarios de la cartera de Seguridad de la provincia se tiraron la pelota ayer y ninguno quiso dar explicaciones sobre la fuga del sábado pasado, la que volvió a poner al descubierto la falta de personal y otras fallas dentro de la cárcel.
Todavía no se entiende, tampoco nadie salió a explicar, cómo es que había supuestamente un sólo guardiacárcel para vigilar a todos los reos del pabellón de enfermería. Claro está que entonces Martín Exequiel Moreno, de 27 años, la tuvo más que fácil para poder fugarse de ese sector y sortear los muros del Penal de Chimbas el sábado último.
Este reo es oriundo de Buenos Aires, ya tenía dos condenas anteriormente y una tercera de 4 años de prisión dictada el pasado 14 de junio del 2006 por robo agravado y tenencia de arma, dijeron fuentes del caso. Esta última pena la cumplía en el pabellón de enfermería a raíz de su adicción a las drogas.
La evasión aparentemente ocurrió a las 15:40 del sábado en el sector de enfermería. Lo único que trascendió es que al momento de la fuga estaban de recreo y supuestamente había un solo guardia custodiando a los presos. Moreno se encontraba en el patio con su mujer, cuando dijo que iba al baño, reveló una fuente del caso. Se llevó a su hijo, pero después el niño regresó solo. La hipótesis es que el preso supuestamente corrió hasta el sector de talleres y trepó una pared para huir hacia calle Benavides, dijo un policía.
Parece que ni los guardias que cubren los perímetros de la cárcel lo vieron escapar. Y otra vez quedó en evidencia, las supuestas fallas en el sistema de seguridad en el Penal de Chimbas. Los agentes penitenciarios dicen por lo bajo que no hay personal y sufre sobrecargas de horarias. Los funcionarios, por el contrario, otra veces salieron a sembrar sospechas de la posible connivencia de algunos guardias con los presos, o hasta llegaron a hablar de "boicot" contra la cúpula penitenciaria o el Gobierno.
La situación es repetida. Pasó con la fuga de Víctor Ibáñez Torres el 9 de marzo del 2008 y en la de Juan Escudero el 25 de abril del mismo año. En la evasión de Rodolfo "El Fofo" Almeida en julio del 2008 o la fuga de José Quiroga, en agosto de ese año. Más todavía, con el escape de Fabio Esquivel Icazati (20), quien fue hasta filmado cuando escapaba de un pabellón de máxima seguridad, la madrugada del 14 de abril pasado. Ahora, fue la fuga de Moreno.
Aún así, los funcionarios de Gobierno no quieren tocar el tema. En especial Abenamar Avila, director del Penal, y el subdirector, que como en los casos anteriores ayer no quisieron hacer declaraciones. Lo mismo pasó con el ministro de Gobierno, Emilio Fernández. Su secretaria directamente dijo que Dante Marinero, el Secretario de Seguridad, iba a ser el encargado de hablar. Lo cierto es que después, la secretaria de Marinero respondió: "dice el general Marinero que con respecto a ese tema no tiene nada para decir ni nada que declarar".

