A Miguel Ángel Vergara (58) no le quedaban ganas de nada, ni siquiera de ir a ver después de varios años de ausencia en las tribunas el partido decisivo que jugó ayer San Martín contra Rosario Central en Concepción por un lugar en la Primera División. Y su amargura no era para menos, porque al hombre le robaron mientras trabajaba su Renault 9 de la puerta de su lomoteca ubicada sobre calle Tucumán, justo frente a la iglesia de la Inmaculada Concepción y a escasos metros de la Seccional 2da. Así, el robo se convirtió en el cuarto ataque similar que ocurre en cuatro días a poca distancia de una sede policial.

Los anteriores y descarados ataques sucedieron entre el miércoles y el viernes. Una de las víctimas fue Lidia Martín (57), una empleada administrativa a quien le llevaron electrodomésticos, joyas y ropa de su casa del Bº Aramburu, Rivadavia. Esa vivienda está ubicada a unos 50 m de la Seccional 27m. El otro hecho tuvo como blanco por segunda vez en pocos días a la Escuela de Nivel Inicial (ENI 20) lindante a la Motorizada V, Chimbas. De allí se robaron aparatos, una bandera, resmas de papel, útiles, 3 kg de plasticola, entre otras cosas. Y de un kiosco situado frente a la Seccional 25ta de Rawson se llevaron unos $5.000 en efectivo y mercadería.

Ayer, Vergara explicó que desde hace años tiene su lomoteca ubicada en calle Tucumán, antes de Juan Jufré, y que siempre estacionó frente al local su auto Renault 9. Ese rodado tenía rotas las cerraduras de las puertas delanteras luego de que le robaran el estéreo en dos oportunidades, comentó la víctima.

El sábado, el comerciante estacionó su auto unos metros al Norte del local porque no había lugar frente a su negocio. Alrededor de la 1 de ayer, una empleada salió a despedir a una amiga y el auto aún estaba allí. Pero cuando Vergara salió media hora después y se topó con que el vehículo había desaparecido.

‘De inmediato me di cuenta que me lo habían robado. No tengo problemas con nadie y mis amigos no me hacen estas jodas. La verdad que no lo puedo creer porque mi negocio está ubicado en una zona muy transitada de Concepción y encima con la Policía a la vuelta. Estas cosas no deberían pasar’, disparó Vergara.