San Juan.- En la mañana de este miércoles, llegó el turno de la declaración de Pedro Oris, el padrastro de Camila Brusotti quien además está sospechado de abusar de la niña, en el juicio en el que se investiga la fuerte golpiza que recibió la menor. El hombre aseguró “Ríos –por Alejandra, la mamá de la nena- maltrataba a Camila”. Y contó lo que, según él, sucedió el día en que la niña quedó al borde de la muerte.

Oris relató que la pequeña hizo la tarea, pero que a su madre no le agradó, por lo que comenzó a pegarle con un cinto, luego la tomó y la arrojó contra un mueble. Él salió y cuando regresó oyó ruidos en el baño y entró. “Ahí encontré a Camila con un ataque. Estaba en el piso, tenía los ojos para atrás y una pierna retorcida”, dijo. Y agregó que “yo la tomé, la acosté e intenté reanimarla. Pero Camila no volvía”.

Por otra parte, afirmó que, en ese momento “llamamos a los médicos y la médica pidió la ambulancia”. Eso, a pesar de que los especialistas habían asegurado en el mismo juicio que la niña pasó 24 horas agonizando.

En cuanto al estado de Alejandra Ríos, afirmó que “estaba fría. No reaccionaba. Pero después se fue con Camila en la ambulancia”. Por otra parte, comentó que fue la mujer quien decidió que le dijeran a los médicos que Camila se había caído del caballo, al tiempo que negó que le hubieran realizado cortes en las manos. ‘Ella se cortó con un alambre que divide los terrenos’.

Por otra parte, puso el acento en que él nunca golpeó a la niña y enumeró varios episodios en los que Alejandra Ríos agredió a su hija. 

Al respecto, contó que ‘un día, la nena se hizo caca encima por el miedo que sentía y la madre le dijo que se sacara el pantalón. Como no podía le pegó con una asadera’. Y afirmó que, después de eso, la niña sintió un fuerte dolor de cabeza y comenzó a arrastrar su pierna derecha a lo largo de alrededor de 45 minutos.

En otra oportunidad, según contó, la maestra de Camila llamó a Ríos para decirle que la nena lloraba en clase y ‘cuando volvieron a la casa la agarró a cachetadas y le pegó con una zapatilla’.

Oris desmintió que lo hubieran despedido del Colegio Saint Paul por merodear el baño de las niñas y que fue él quien renunció porque le salió un trabajo mejor.