Un niño adoptado de 4 años que estaba internado desde el pasado domingo 17 de noviembre en el Servicio de Terapia Intensiva Pediátrica del Hospital Rawson murió a las 22.45 del último miércoles.
Había entrado ese día al nosocomio, casi sin signos vitales, tras sufrir un ataque de convulsiones en su casa cerca del Parque de Mayo, en Capital, donde vivía con sus padres adoptivos, dijeron fuentes policiales.
Tras el fatal desenlace, desde la Justicia se ordenó iniciar una investigación para saber si anteriormente el niño fue o no víctima de algún ataque que pudiera haberle dejado alguna secuela que le provocara el cuadro convulsivo, explicaron fuentes vinculadas al caso.
El pequeño, llamado Alexis Munizaga, estuvo en manos del Estado hasta que encontró la familia con la que estuvo hasta morir. La misma fue calificada por las fuentes como "excelente".
La autopsia que ayer le practicaban al cadáver determinará la causa de muerte.