Levantarse temprano por la mañana, tomar su moto y recorrer los 25 km que separaban su vivienda de la escuela secundaria donde se desempañaba como preceptor y, algunas tardes a la semana, como profesor agropecuario, era la rutina de Carlos Enrique Quilpatay (43), un docente de la escuela agrotécnica Cornelio Saavedra de Rodeo, Iglesia, quien además se hacía tiempo para desempeñarse como presidente del Club Sportivo Los Andes, de Tudcum, contó entre lágrimas su madre. Pero esa rutina tuvo un trágico quiebre ayer en el enésimo viaje rumbo a su trabajo: Una yegua maneada se atravesó sobre la ruta 150 y el maestro no pudo hacer nada por esquivarla, dijeron en la Policía. A pesar de que llevaba casco, el hombre quedó malherido y unos minutos después, falleció cuando era asistido en el hospital de Iglesia.
Según la policía, el choque ocurrió alrededor de las 7.30 frente al hotel de Pismanta, en un tramo recto de ruta 150. Amelia Tejada, madre del fallecido, comentó vía telefónica a este diario que su hijo hacía casi 20 años que trabajaba como docente, era separado y padre de dos hijos de 13 y 9 años. "Siempre era prudente para manejar y nunca pensamos que le iba a suceder una cosa así", agregó la mujer.
Quilpatay circulaba hacia el Norte en su moto Maverick 110cc.. La hipótesis policial es que el hombre no pudo hacer nada para esquivar al animal porque, tal vez, se le atravesó de imprevisto para tomar agua.
Una maestra que viajaba más atrás, llegó al lugar y llamó a la Policía. Quilpatay fue trasladado luego al Hospital Tomás Perón de Rodeo, donde falleció mientras era asistido.
Anoche, los policías de la Comisaría 22da. trataban en ubicar al dueño de la yegua, aunque reconocieron que iba ser una tarea difícil porque el animal no tenía marcas de sangre ni de fuego.
"En ese tramo de la ruta ya han ocurrido muchos accidentes y no hay señalización de animales sueltos, es hora de que hagan algo para que no les pase a otros", se quejó a su vez Marilyn, hermana del fallecido.