Guillermo Mañé, de 76 años, murió ayer en la tarde noche después de permanecer internado 10 días después de ser hallado deshidratado y descompensado en un baldio en Caucete.
Todavía no se sabe que le pasó al vendedor de sánguches el miércoles 16 de agosto cuando fue visto por última vez en la Terminal de Caucete. Su familia denunció su desaparición y 24 horas después fue encontrado en grave estado. La principal hipótesis es que convulsionó y se desvaneció.
Desde entonces permaneció internado en grave estado en el Servicio de Urgencia del Hospital Rawson hasta que anoche falleció.