Tenía sólo dos opciones: entregarse a la policía o evadirse. Guillermo Lucero eligió la más difícil y la peor, la de escapar, sin suponer siquiera que sería lo último que haría en su vida. Huyendo de la policía llegó hasta el barrio Uruguay en Concepción, Capital, y trepó arriba de una casa para continuar su fuga por los techos. Un mal paso o el rumbo equivocado, hizo que resbalara de un tejado y fuera a caer justo encima de las rejas de un portón. La punta de uno de los caños se le incrustó en el abdomen y, aunque salió y caminó por la vereda unos metros, el joven tuvo los minutos contados. Murió en el hospital Rawson.

Un viejo dicho reza: "el que mal anda, mal acaba", pero lo que le sucedió Guillermo Emanuel Lucero (19) ya fue por demás. "El Cara de Vaca", como lo apodaban, pagó caro la osadía de escapar de los uniformados de la Seccional 17ma. La malograda huida terminó con el joven muerto en el servicio de Urgencias del Hospital Rawson ayer a las 9 de la mañana.

Lucero tenía antecedentes penales, afirmaron en la policía. Sin ir más lejos, del 3 al 5 de este mes estuvo preso en la Seccional 26ta. acusado de lesiones y atentado y resistencia a la autoridad, confirmó un jefe policial. Ayer, los policías de la Seccional 17ma. lo fueron a buscar por su posible vinculación con el robo de una moto y el asalto a la tienda Flick en avenida Libertador, Desamparados, la noche del 23 de julio pasado, precisaron las fuentes.

La pista surgió después de que el jueves 6 de este mes, una patrulla policial de Chimbas interceptó a un motociclista en Villa El Salvador, quien tiró el rodado y escapó. La moto era una Honda 105cc., la misma que había sido robada a Eliana Pérez durante el asalto a Flick. Y el que la había abandonado, de acuerdo al reconocimiento que hicieron los policías, era Guillermo Lucero, al que conocían por sus antecedentes.

Por eso mismo, ayer pasadas las 8 allanaron su casa en calle 1º de Mayo en Bº Laprida, Chimbas. Según la versión policial, cuando irrumpieron, Lucero corrió al fondo y escapó por las propiedades linderas. Los uniformados salieron a buscarlo. Lucero tomó hacia el Este, cruzó las calles Salta, luego Alem, para luego tomar al Sur hasta cruzar Benavides, relató un oficial. Ahí pasó bordeando el canal y trepó a lo alto de una casa situada en una esquina -cerca de Benavides y Salta- de la manzana 6 del Bº Uruguay, Concepción. A esa altura, un solo policía venía detrás de él, relató el subcomisario Aldo Brizuela.

Lucero supuestamente pasó por arriba de varias viviendas hasta salir a la casa 8, propiedad de Estela Macias, ubicada en otra esquina. Llegó hasta el techo de tejas a dos aguas y aparentemente resbaló, con tanta mala suerte, que cayó encima de las rejas del portón del garage que estaba abierto. Al precipitarse, uno de los caños metálicos de cuatro caras y de unos 3 cm. de ancho terminado en punta, se le clavó en un costado del abdomen, revelaron en la policía. Habían versiones de que el caño le atravesó todo el vientre, pero eso no fue confirmado. Anoche, no se conocía el resultado de la autopsia. Un vecino contó a los uniformados, que el mismo joven hizo fuerza hasta salir de la reja. Caminó por la vereda hacia el Oeste, dejando una chorrera de sangre a su paso y, cuando ya no pudo más, se sentó. Para entonces llegaron los uniformados, que lo detuvieron y pidieron una ambulancia. Guillermo Emanuel Lucero se desangró y murió a los pocos minutos de ingresar al hospital.