Para el juez de Garantías Alberto Caballero no quedaron dudas: el guardavidas Juan Simón Molina (34) fue negligente y no cumplió con su deber de cuidado, cuando el pequeño Santiago Furlotti (3 años) cayó y se ahogó en la pileta del camping del Foro de Abogados en Rivadavia, sin que él nada pudiera hacer, el pasado 12 de diciembre. Por eso lo condenó a 1 año de prisión de cumplimiento condicional (sin detención) y a 5 de inhabilitación para volver a ejercer como guardavidas.
El fallo pareció conformar al fiscal coordinador de la UFI de Delitos Especiales, Adrián Riveros, y a los abogados de la familia de la víctima, Franco Montes y Marcelo Fernández, que habían pedido mayor castigo: Fiscalía buscaba 3 años de pena sin encierro y el doble de inhabilitación. La Parte Querellante 4 años de pena efectiva y 8 de inhabilitación para ejercer esa actividad.
Quienes no estuvieron para nada conformes con el fallo, fueron los abogados de Molina, Leonardo Villalba y Carla Manini. Ayer, pidieron la absolución de Molina por el beneficio de la duda, pues consideraron que no se probó que el nene ingresara por la puerta principal al perímetro de la pileta que custodiaba Molina. También cuestionaron la investigación fiscal y principalmente a los padres del niño; hasta pidieron al juez que ordene investigarlos por falso testimonio, por sus contradicciones y porque -en su opinión- no cuidaron a su hijo y estaban lejos de él cuando ocurrió el accidente.
Manini también le dijo al juez que el menor sufrió una fractura cervical y que cayó inconciente al agua, pero desde Fiscalía y la Querella criticaron esa teoría al asegurar que la autopsia no revelaba esas lesiones y fue contundente sobre el ahogamiento como causa de muerte.
Molina se excusó de hablar ante los medios tras conocer el fallo. Su madre en cambio se mostró molesta y dolida por la decisión judicial. Sus abogados defensores anticiparon que impugnarán el fallo.